Hoy se celebra el Día Internacional del Medioambiente, una fecha clave para reflexionar sobre los retos que plantea la comunicación multilingüe en un mundo cada vez más globalizado. En este contexto, resulta imprescindible adecuar los mensajes medioambientales para avanzar hacia modelos sostenibles, inclusivos y respetuosos con la diversidad cultural.
Nuadda Translation, empresa especializada en la gestión de comunicación multilingüe, subraya la urgencia de adoptar el lenguaje claro como pilar fundamental para comunicar los compromisos y acciones en materia de sostenibilidad.
Cuando se habla de lenguaje claro, se hace referencia a la forma en que se estructura, redacta y presenta la información con el fin de hacerlo más comprensible para todas las personas, independientemente de su formación o contexto sociocultural. En este marco, los principios ESG (ambientales, sociales y de gobernanza) adquieren cierta relevancia en la estrategia empresarial. Nuadda destaca que la claridad en la comunicación no debe ser una opción, sino un requisito.
“Hablar de sostenibilidad con transparencia y sencillez es esencial para que los mensajes sean comprendidos por todos los públicos, sin exclusión ni ambigüedades”, explica Arancha Caballero, lingüista, CEO de Nuadda, presidenta de ANETI y miembro activo de los comités técnicos de Servicios de traducción y Lenguaje claro de UNE.
Iniciativas como la norma UNE-ISO ISO 24495-1 sobre lenguaje claro reflejan la necesidad de transmitir eficazmente la información a los lectores. Asimismo, las buenas prácticas en redacción, traducción y localización se convierten en una herramienta de transformación, capaz de fomentar y acercar políticas medioambientales a la ciudadanía.
En este marco, el uso del lenguaje claro también constituye una salvaguarda frente al greenwashing. Esta práctica consiste en proyectar una imagen de compromiso ecológico que no se corresponde con la realidad. Comunicar con claridad y con base documental evita ambigüedades o promesas vagas. Asimismo, permite verificar y comprender de forma objetiva el alcance a las acciones medioambientales.
La sostenibilidad no puede comunicarse desde la opacidad, sino desde un lenguaje claro y comprensible. Por ello, Nuadda aboga por una comunicación multilingüe ética, basada en estándares de calidad y adaptada a las personas, que impulse el entendimiento y el compromiso colectivo frente a los desafíos medioambientales actuales.
Green-hushing: el silencio verde
No solo el greenwashing representa un riesgo en la comunicación ambiental. También lo es el fenómeno opuesto, conocido como green-hushing o “silencio verde”, por el cual algunas organizaciones deciden no hacer público su progreso en sostenibilidad por temor a las críticas. Según la encuesta Más allá del Net Zero, elaborada por South Pole 2022, el 23% de las empresas optan por no divulgar sus avances en esta materia, lo que limita la transparencia, reduce la confianza y obstaculiza la creación de referentes positivos en el sector.
Nota:rrhhdigital.com
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