Limpieza étnica
El diario Haaretz de Israel denunció en un editorial el programa de asedio y hambruna propugnado por general (R) Giora Eiland, conocido como "el plan de los generales". La operación de las fuerzas armadas de Israel en Jabalya, al norte de la franja de Gaza, se inició con la declarada intención de dañar la infraestructura militar que Hamas había logrado reconstruir. Pero, según el diario, los residentes de Jabalya, los altos funcionarios de defensa y la comunidad internacional sospechan que Israel ha comenzado a implementar efectivamente el plan criminal de Eiland. Para el periódico, la voz más crítica en la prensa del país sobre la política del gobierno ultraderechista de Benjamín Netanyahu, el plan de Eiland es un crimen de guerra.
Añade que en Israel "se han normalizado los conceptos de traslado de población, negación de ayuda humanitaria, expulsión, ocupación y asesinatos en masa, y muchos partidarios de estos crímenes de guerra los apoyan como un plan".
También dice que hay miembros del gabinete que ven la guerra como una oportunidad histórica para regresar a la Franja de Gaza. El gobierno estadounidense de Joe Biden le dió a Israel 30 días para que permita la entrega de ayuda humanitaria a Gaza, si no desea un corte en la ayuda militar estadounidense. La ayuda que Israel permitió ingresar es muy inferior a lo necesario, dice el diario Haaretz citando a "diplomáticos extranjeros". Agrega que la crisis humanitaria provocada en forma intencional –que enumera como falta de agua y alimentos, hospitales asediados, prácticamente ningún edificio en pie, cientos de personas muertas e innumerables heridas– hace pensar que el verdadero objetivo israelí en Jabalya es obligar a sus habitantes a desplazarse hacia el sur. Temen que en caso de hacerlo, no se les permita regresar.
El gobierno niega que esté poniendo en práctica el plan de los generales, pero los temores de la comunidad internacional no han disminuido. El diario comparte esa idea, porque "no hay forma de explicar el maltrato a los residentes de Jabalya, salvo como parte de un plan para empujarlos permanentemente hacia el sur". Su conclusión es que Israel debe aumentar la ayuda humanitaria al norte de Gaza y poner fin a sus intentos de desplazar a sus residentes. Y, por supuesto, debe abstenerse de llevar a cabo planes de expulsión, hambre y asedio. La guerra en Gaza debe terminar avanzando hacia un acuerdo para repatriar a los rehenes y la declaración de un alto el fuego.
Las cosas parecen ir en otra dirección. El lunes 21 la Conferencia de las Naciones Unidas sobre C0mercio y Desarrollo (UNCTAD) publicó un informe según el cual si la guerra terminara mañana y Gaza volviera al status quo previo al ataque de Hamas a Israel del 7 de octubre de 2023, su devastada economía necesitaría 350 años para volver a su precario nivel de preguerra.
El Cohete a la Luna