La teoría del derrame no existe. Si bien el Estimador Mensual de la Actividad Económica (EMAE) de mayo arrojó un alza interanual del 2,3% y un avance mensual del 1,3%, los despidos ya se cuentan de a miles. El crecimiento estadístico fue impulsado por el sector agropecuario, hidrocarburos y minería. La administración de La Libertad Avanza apuesta por la reprimarización de la economía, basado en la exportación de materias primas con poco valor agregado. Del otro lado, la construcción exhibió un retroceso del 22,1% mientras que la industria manufacturera cayó un 14% interanual.

Por eso, el 80% de las empresas industriales ya tuvieron que echar al menos un obrero en lo que va del año y el sector de la construcción perdió 140.000 puestos directos durante el primer trimestre del año comparado con el mismo período del año pasado.

Un impulso que no alcanza

El programa económico de La Libertad Avanza posee como elemento constitutivo la destrucción del entramado productivo y el mercado interno. El Gobierno les juega un pleno a las exportaciones de materias primas y a una esperada “lluvia de divisas” basada en el Régimen de Incentivo a las Grandes Inversores (RIGI), eufemismo de la economía de enclave que se viene.

En mayo de este año, el sector agroexportador exhibió un avance del 103% en su comparación interanual. La comparación se realiza con lo peor de la sequía del 2023. Según el EMAE, el agro había caído un 40% al quinto mes del año pasado. Las actuales rentabilidades del sector – también urgido por la suba de costos- no derraman. Por su parte, el sector comprendido en la categoría “minas y canteras”, que incluye hidrocarburos y minería, registró un avance interanual del 7,6%. Tampoco hay derrame. Con el avance de estos sectores, el EMAE de mayo arrojó un resultado positivo de 2,3% interanual. Avanza la apuesta reprimarizadora de la gestión Milei.

El mercado interno exhibe otra realidad. “Nueve sectores de actividad registraron caídas en la comparación interanual, entre los que se destacan Construcción (-22,1%) e Industria manufacturera (-14,2%). Junto con Comercio mayorista, minorista y reparaciones (-11,41%) le restan 4,6 puntos porcentuales al crecimiento interanual del EMAE”, puede leerse en el último informe del Indec.

Otra realidad, la misma Argentina. La crisis industrial no encuentra techo ni piso. En mayo de 2024, quince de las dieciséis divisiones de la industria manufacturera presentaron caídas interanuales. Según el Indec, las principales caídas fueron las siguientes:

* Industrias metálicas básicas: -25,0%
* Alimentos y bebidas: -6,4%
* Productos minerales no metálicos: -32,4%
* Madera, papel, edición e impresión: -18,4%
* Maquinaria y equipo: -22,0%
* Muebles y colchones, y otras industrias manufactureras: -33,6%

“La industria siderúrgica cae 31,6% interanualmente en mayo. Según la Cámara Argentina del Acero, las elaboraciones de productos laminados en caliente y de laminados en frío muestran caídas de 40,9% y 21,2%, respectivamente. Se refleja una baja interanual en la demanda, principalmente por parte de la actividad de la construcción, de la industria automotriz, de la industria de maquinaria agrícola y del sector fabricante de electrodomésticos”, puede leerse en el último informe del Indec (IPI manufacturero). 

Sin techo ni piso. De acuerdo a un reciente documento publicado por la Asociación de Industriales Metalúrgicos (Adimra), en junio continuó el derrumbe. “La actividad registró durante junio una caída en su producción del 17,3% interanual y respecto a mayo de este año, la disminución fue del 1,9%", indicaron desde Adimra.

La Cámara de la Pequeña y Mediana Industria Metalúrgica (CAMIMA) también expresó lo suyo: “La actividad metalúrgica cayó -16,5% en junio respecto del mismo mes de 2023 y acumuló una baja cercana al -11% en el primer semestre de este año”, puede leerse en su último informe sectorial.

La crisis también puede vislumbrarse a través de los informes del intercambio comercio, con un marcado descenso de las importaciones claves para la industria. En mayo, las importaciones registraron un descenso del 32,8%. En el caso de los bienes intermedios, la caída fue del 26%, seguido por un derrumbe del 28% en piezas y accesorios. Por su parte, las compras de bienes de capital -categoría que podría ser entendida como inversión privada en maquinarias- cayeron otro 33%.

En junio, la situación tampoco mejoró. Las importaciones volvieron a derrumbarse, en promedio, un 35,4%. Así lo publicó el Indec en su último documento sobre el Intercambio Comercial.

Despidos

De acuerdo a un estudio realizado por la Confederación de Sindicatos Industriales de la República Argentina, en conjunto con el Centro de Economía Política Argentina (CEPA), el 80% de un conjunto de 61.000 empresas industriales tuvo que despedir al menos un trabajador como consecuencia de la recesión planificada por la administración Milei.

La Confederación nuclea 61.728 empresas dividas en 18 sectores de actividad: construcción, metalmecánica, textil, madera, molineros, papeleros, petróleo y gas, etc. En total, involucra a 1.097.693 trabajadores, de los cuales solo un 56,7% se encuentra sindicalizado. La metodología incluyó un cuestionario con 25 preguntas, abarcó a 36 gremios, concretado entre el 23 de mayo y 6 de julio.

Entre las 61.000 empresas consultadas, el 80% tuvo que despedir personal. Pero también se registraron otras dinámicas vinculadas a la caída de ventas y de la producción, con incidencia directa en la vida de los trabajadores y trabajadoras, como por ejemplo suspensiones, retiros (poco) voluntarios, jubilaciones anticipadas y recorte de horas extras:

*Suspensiones: 60% de los encuestados señaló que sus trabajadores sufrieron algún tipo de suspensión.

*Retiros voluntarios: el 80% de las empresas han implementado esta operatoria.

*Jubilaciones anticipadas: se relevaron casos en 35% de las empresas.

*Recorte de horas extras: se computaron recortes de horas extras en el 90% de los casos.

*Adelanto de vacaciones: 65% de los casos declaró casos en sus empresas

Por Sebastián Premici / El Destape