





El Gobierno volvió a aprobar aumentos en las tarifas que están por encima de la inflación. Este lunes, el Ente Nacional Regulador de la Electricidad (ENRE) lanzó un nuevo cuadro tarifario que las distribuidoras eléctricas del AMBA ya están aplicando y que supone subas en las facturas del orden del 3,8 por ciento, en línea con lo que se había firmado el viernes pasado respecto del servicio de gas natural. Además, se avanza con un viejo reclamo de las distribuidoras, que es pasar a una medición de tipo mensual en lugar de la bimestral que se venía utilizando hasta ahora.
De acuerdo a lo informado en el Boletín Oficial, Edenor y Edesur ya aplican desde el 1 de noviembre los nuevos cuadros tarifarios vinculados a los costos de distribución, el precio de la energía mayorista y el transporte eléctrico que les reconoce el Gobierno.
El incremento que enfrentarán los hogares se explica por la conjunción de varios factores. Por un lado, el ENRE aprobó los nuevos valores del Costo Propio de Distribución (CPD), que es el componente de la tarifa que remunera a la distribuidora por su servicio. En el caso de Edesur, se incrementa en un 3,53 por ciento respecto a octubre, mientras que para los usuarios de Edenor, la suba es del 3,6 por ciento.
Asimismo, está la actualización del precio mayorista de la energía, que según la Secretaría de Energía se incrementa 3,45 por ciento para el período noviembre 2025–abril 2026. Por último, también se actualiza el componente de transporte eléctrico en alta tensión, que sube 7,61 por ciento.
El efecto final es de un incremento que se calcula en el orden del 3,8 por ciento, bien por encima de la inflación y de la dinámica que se viene registrando respecto de los salarios, con lo cual es un golpe al bolsillo inmediatamente después de las elecciones. Los aumentos afectan a los usuarios de los tres niveles de segmentación de acuerdo al peso de los subsidios en las boletas, y también a los clubes de barrio y de pueblo y Entidades de Bien Público.
Este incremento se suma a lo definido el viernes último respecto de las boletas de gas, que también suben en una cuantía parecida a la electricidad. En el caso del gas, el alza también se explica por un incremento en el precio de gas natural en el Punto de Ingreso al Sistema de Transporte (PIST) en un 3,2 por ciento, a lo que debe sumarse otro 0,3 por ciento por efecto de la devaluación del último tiempo, a lo que se suman aumentos en similares proporciones para el costo de la distribución y transporte del gas.
Medición
Por otro lado, el ENRE autorizó a Edesur y a Edenor a modificar el período de facturación para sus usuarios residenciales. De este modo, pasarán de la lectura bimestral a la lectura y facturación mensual de los medidores.
La medida cambia la metodología de facturación que regía desde 2016. Hasta ahora, las distribuidoras medían el consumo cada dos meses, pero dividían el pago en dos facturas mensuales, lo que -según se argumentó en los considerandos- generaba "confusión" y un "desfase temporal" entre el consumo real y el cobro.
Con este cambio, "se busca brindar una señal más clara, transparente y oportuna del consumo, permitiendo a los usuarios un mejor control y autogestión de su economía y sus hábitos energéticos", argumentó el gobierno.
El proceso de migración al nuevo sistema implica un "Período de Transición", durante el cual se podrán generar ajustes o superposiciones en la facturación. Ante esta situación, el ENRE estableció una serie de condiciones obligatorias para las distribuidoras:
*Planes de pago sin interés: por los saldos remanentes o ajustes que se generen debido al cambio de metodología, Edesur y Edenor deberán ofrecer planes de facilidades de pago "sin anticipos ni aplicación de intereses".
*Ajuste en al menos dos facturas: los montos de ajuste deberán dividirse, como mínimo, en dos liquidaciones de Servicio Público (LSP), y deberán consignarse de forma diferenciada en la factura bajo la leyenda “Ajuste migración mensual".
*Prohibición de corte por falta de pago: las distribuidoras "deberán abstenerse de implementar todas las acciones de morosidad y corte de suministro por falta de pago" de las LSP que se emitan a raíz de esta modificación.
*Comunicación clara: las empresas deberán implementar un "plan de comunicación adecuado" que explique de forma "clara y fácilmente comprensible" el alcance de la nueva metodología.
*Costos a cargo de las empresas: el ENRE dejó en claro que la autorización no implica "reconocimiento en tarifa de los mayores costos operativos" en que puedan incurrir las distribuidoras por la implementación de la lectura mensual.
Fuente: Página 12
























