


Campo sí, jubilados no: bajar las retenciones cuesta lo mismo que la suba de jubilaciones que vetará Milei
Actualidad - Nacional29/07/2025




El presidente Javier Milei tildó de "degenerados fiscales" y hasta de "genocidas" a quienes apoyaron las leyes previsionales que el Congreso sancionó hace dos semanas, y que él anticipó que vetará. Sin embargo, el beneficio de la baja de retenciones que le dio al campo el último sábado tiene el mismo costo fiscal, según indicó un informe privado.


“Desde hoy (por el sábado), las retenciones a la carne aviar y vacunas se reducirán del 6,75% al 5%; las de maíz y sorgo bajan del 12% al 9,5%; las de girasol del 7,5% a entre 5,5% y 4%; y las de soja del 33% al 26%, al tiempo que los subproductos pasan del 31% al 24,5%”, anunció el Presidente el último sábado en su discurso en la tradicional Exposición Rural, que organiza la Sociedad Rural todos los años en Palermo.
Se trata de una reducción de un 25% del total tributado en el caso de las carnes y el girasol, y de una reducción de un 20% del total tributado en el caso de la soja y el sorgo. Cifras importantes que reproducen, ahora de manera permanente, la misma baja temporal que había sido establecida entre febrero y junio pasados.
"Eliminar las retenciones es una obsesión para nuestra gestión y hemos dado muchos avances en esa dirección", destacó el Presidente en su discurso. "Es muy importante tener presente que todo esto es posible únicamente gracias al superávit fiscal que hemos conseguido, al cual cuidamos como agua en el desierto ante los embates sistemáticos de la casta política", agregó.
Para Milei, sin embargo, el superávit fiscal permite bajar impuestos a sectores acomodados, pero no permite mejorar el poder adquisitivo de los seis millones de jubilados que posee el país. En su misma alocución, frente a los miles de productores rurales y referentes del campo que lo escuchaban, se refirió a las leyes de aumento a los jubilados, extensión de la moratoria previsional y declaración de la emergencia en discapacidad que el Congreso sancionó el 10 de julio pasado.
"Para proteger el superávit fiscal, que es el ancla que nos está llevando al futuro, vamos a vetar estas leyes que lo que buscan es llevar al país a la bancarrota y a la pobreza", reiteró por enésima vez. Del mismo modo, volvió a tildar de "degenerados fiscales" a quienes apoyaron las iniciativas y piensan apoyar también el rechazo al veto. Y les añadió otro epíteto: "No son más que genocidas del futuro, son asesinos de nuestros hijos, nuestros pobres y nuestros indefensos, que con tal de rasquetear un puñado de votos hoy son capaces de condenar a generaciones futuras enteras a la miseria".
El costo fiscal de la baja de retenciones anunciada por Milei
Lo curioso es que, en verdad, el costo fiscal de la "degenerada" ley de aumento jubilatorio y de la virtuosa baja de las retenciones es el mismo. Así lo reveló un informe privado elaborado por el Instituto para el Desarrollo Social Argentino (IDESA) el último domingo, que precisó que la reducción parcial de los derechos de exportación anunciada por Milei el sábado "equivale al 0,2% del PBI".
Según determinó el informe elaborado por la Oficina de Presupuesto del Congreso hace unos 10 días, este 0,2% es justamente el mismo costo fiscal que tendría el aumento de un 7,2% a los jubilados entre agosto y diciembre, sancionado por el Senado.
Más aún, el costo fiscal de aumentar el bono para jubilados que ganan la mínima desde los 70.000 pesos actuales (cifra en la que se encuentra congelado desde marzo de 2024) a 110.000 pesos, tiene un costo todavía menor, del 0,12% del PBI, según la misma OPC.
A su vez, es incluso más bajo que eso el costo de extender la moratoria previsional vencida originalmente a fines de marzo pasado, otra de las iniciativas que el Congreso sancionó a inicios de julio. En este sentido, la misma OPC determinó que es del 0,094% del PBI.
Es decir, Milei podría elegir no vetar el aumento a los jubilados en vez de quitarle impuestos a un sector acomodado como el campo y afrontar el mismo costo fiscal. O, alternativamente, podría promulgar el aumento del bono jubilatorio a 110.000 pesos junto con la extensión de la moratoria, dos medidas que, juntas, también tendrían el mismo costo fiscal que la baja de las retenciones.
Además, el Presidente podría promulgar todo el paquete sancionado por el Congreso, incluyendo también la emergencia en discapacidad, por un costo total del 1,15% del PBI según cifras de la OPC. O sea, sin comprometer el superávit, que prevé para este año por un 1,6% del PBI, según la meta a la que se comprometió con el FMI.
Puede discutirse si las retenciones son un impuesto virtuoso por la redistribución que implica (como ocurría durante la era de Néstor Kirchner) o si resulta distorsivo y compromete la productividad del país. Lo que resulta más evidente es el ingreso de miseria que recibe más del 60% de los jubilados, un grupo que no es prioridad por motivos que, como demostró el Presidente el sábado, van más allá de lo meramente económico.
Uno por uno, el impacto fiscal de las leyes previsionales y de la baja de retenciones
- Baja de las retenciones al agro (fuente: IDESA)0,2% del PBI
- Leyes previsionales (fuente: OPC)Aumento de un 7,2% en las jubilaciones: 0,2% del PBI
- Aumento del bono jubilatorio a 110.000 pesos: 0,12% del PBI
- Extensión de la moratoria: 0,094% del PBI
- Total leyes previsionales: 0,41% del PBI
Por Javier Slucki / El Destape







