Glenn Bell se acordaba del primer cliente que había ido a su local. "Estaba vestido de traje y, apenas mordió el taco, el jugo empezó a correr por su manga hasta mancharle la corbata", detalló en su biografía ‘El titán del taco'. En ese momento pensó que lo había perdido. Ese hombre elegante no volvería a su restaurante. "Estaba bueno. Dame otro", le dijo aun con su corbata cubierta de jugo. Hoy Taco Bell, la cadena que fundó hace 60 años, vende más de 2000 millones de tacos al año y cuenta con 8218 locales en el mundo. Pero este no fue el primer emprendimiento gastronómico en el que se aventuró.

Si bien nació en Lynwood, California, en 1923, cuando tenía 12 años su familia se mudó a San Bernardino. Desde joven, Bell salió a trabajar y en 1943 se unió al Cuerpo de Marines de los Estados Unidos. Después de la Guerra del Pacífico, regreso a casa y compró un camión con el que transportaba ladrillos de adobe. Tras algunos negocios que fracasaron decidió abrir su propio puesto de hot dogs.

Los drive-in estaban de moda en el sur de California. Servicio rápido, menús económicos y servicio directo en el auto. En 1946 abrió Bell's Drive-In en San Bernardino a pocos kilómetros de distancia de donde los hermanos McDonald habían inaugurado su local. Cuatro años después sumó una hamburguesería en el barrio latino.

Los tacos de Bell
Enfrente de su restaurante había un puesto de comida mexicana al cual Bell iba todas las semanas. Siempre veía que este negocio tenía largas filas de personas comprando tacos fritos y vio el potencial del producto. Durante dos años comió ahí, se hizo amigo del dueño y este le enseñó cómo hacerlos. Entonces Bell empezó a venderlos en su emprendimiento hasta que lanzó un proyecto independiente.

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Se asoció con otra persona y creó un puesto de tacos llamado Taco-Tia en 1952. Llegó a tener tres sucursales, pero su socio se resistía a continuar expandiéndose por lo que vendió su parte. En 1957 abrió El Taco junto a tres socios, pero poco después se dio cuenta que quería tomar sus propias decisiones y no depender de nadie más. Finalmente en 1962 inauguró el primer Taco Bell con una inversión de u$s 4000 en Downey, California.

La primera sucursal de Taco Bell solo tenía cinco ítems en el menú: tacos, burritos, frijoles, tostados y chili Burger. Bell diagramó el plan de negocios con la idea de franquiciar la marca. Al año siguiente ya había logrado vender su primera franquicia en Torrance, California.

Negocio millonario
El crecimiento de la cadena fue exponencial. Para 1967 contaba con 100 sucursales y había empezado a mostrar su creatividad e inventiva con productos nuevos en el menú. Uno de los primeros lanzamientos fueron los enchiritos, una combinación de burritos y enchiladas. Luego llegaría la ensalada de taco y la pizza mexicana, entre otros.

Bell le vendió su empresa a PepsiCo que en 1978 desembolsó u$s 125 millones. El holding alimenticio manejó la marca hasta 1997 cuando separó su división de fast food, integrada por Pizza Hut, Taco Bell y KFC, y creó Tricon Global Restaurantes (Yum! Brands desde 2002).

La cadena de comida tex mex primero se expandió por la costa oeste y en los 90 ingresó con fuerza en la otra mitad del mercado. El servicio drive-thru se convirtió en uno de sus pilares. Según un estudio elaborado por Intouch Insight y QSR, es la tercera cadena de fast food con el servicio más rápido de los Estados Unidos. En 2022 inauguró un local exclusivo para autos con cuatro carriles y dos pisos.

El año pasado la empresa facturó u$s 14.653 millones, un 24,1% de los ingresos totales de Yum! Brands. A nivel global la marca cuenta con 8218 locales en 30 países. 

Nota:apertura.com