El domingo 12 iniciará formalmente el calendario electoral con los comicios internos en la provincia de La Pampa. De seis ofertas políticas, la única que disputará el nombre que llegará a las generales será Juntos por el Cambio y sus dos candidatos, uno por la UCR y otro por el PRO, encararon la recta final de la campaña para ver cuál deberá enfrentarse al fortalecido gobernador local, Sergio Ziliotto, con el peronismo unido detrás de su figura.

En La Pampa no hay PASO, tampoco hay PAS. Por lo tanto, las candidaturas se resolverán mediante internas abiertas pero sólo estarán habilitados a participar quienes tengan más de una oferta electoral. O sea, el domingo 12 sólo estarán las boletas de Martín Maquieyra por el PRO y de Martín Berhongaray por la UCR, ambos actuales diputados nacionales. Aquí, como en el caso de Chubut mencionado en otra nota de El Destape, el radicalismo también mostró mayor cantidad de afiliados pero al tener la posibilidad de conquistar a independientes, el macrismo podría hacer fuerza.

Los únicos obligados a votar el 12 serán los afiliados a Juntos por el Cambio, por lo que hace semanas arrancó un operativo seducción para conquistar a la mayor cantidad de independientes, de uno y otro lado, para intentar imponerse. Si bien en un principio el macrismo creyó que podría perder la interna, sobre el filo del armado de las listas el radicalismo sorprendió con un candidato que no estaba en el radar de ninguno, por lo que ningún resultado, ahora, se planteó como un hecho consumado.

Esa situación, sumada a la potencia del PRO en materia de medios de comunicación, podría ser determinante. En la provincia se acusó que el macrismo usó una tragedia, como la de Lucio Dupuy, para levantar la imagen de Maquieyra, autor de una ley en tratamiento en el Congreso. Algo que se emparentó a actitudes similares con el caso de Cromañón o la tragedia de Once.

Al candidato inesperado y a la fuerza mediática y económica de los amarillos, también se le añadió otro condimento: la interna radical. En el cierre de listas, había tres nombres en la mesa. Uno muy débil, que se bajó temprano durante la jornada; la figura puesta para volver a intentar ganar la gobernación, la de Daniel Kronenberger; y la del tapado Berhongaray. Según trascendió, Kroneberger recibió un llamado a las 20, en ese día tan particular, y mágicamente optó por no participar, dándole el lugar al diputado.

A casi una semana de la elección, para Berhongaray el resultado hasta ahora fue positivo. Encontró un buen recibimiento de parte de los pampeanos, a quienes describió como un pueblo “cálido y hospitalario” que le dio una “respuesta muy importante” porque lo conocen y saben de su trabajo. Además, el diputado destacó que desde hace muchos años se preparó para gobernar La Pampa, el lugar que eligió para vivir junto a su familia.

Le otorgó a esa coherencia y ese camino la decisión de la UCR de elegirlo, en esta oportunidad, como el candidato para disputar la intera que, para él, es un “sueño personal”. En medio de las recorridas por la provincia, seguramente recibirá, en los próximos días, a Gerardo Morales y Martín Lousteau, presidente y vice segundo del Comité radical a nivel nacional, además de otros dirigentes a nivel país, intendentes pampeanos, candidatos a intendentes, concejales, jueces de paz y otros referentes locales.

Su cierre de campaña será en el salón del Centro de Empleados de Comercio de Santa Rosa, que es donde últimamente se desarrollaron este tipo de eventos. La convocatoria será el jueves de la semana que viene a las nueve de la noche. Del otro lado, Maquieyra hará varios cierres de campaña en distintas localidades, siguiendo su cronograma de recorridas, y estará acompañado por diversos dirigentes, en algunos casos también nacionales que justo estén en la zona para esa fecha.

El fixture macrista en La Pampa se mostró extenso. Mauricio Macri, que tenía previsto visitar la provincia este jueves, postergó su presencia para el sábado y el miércoles estuvo Waldo Wolff, un enviado de la Capital Federal ya que Horacio Rodríguez Larreta lo acompañó hace diez días y, por el momento, no era esperado nuevamente por la zona. El lunes viajará Patricia Bullrich, titular del PRO y el miércoles lo hará María Eugenia Vidal para terminar la campaña con fotos junto toda la plana mayor amarilla.

Al igual que su contrincante radical, para Maquieyra se volvió imprescindible apuntar a los sectores de los independientes con la intención de abultar la cantidad de votos posibles. Para eso, estableció un fuerte cronograma de recorridas, acompañado por el aparato partidario y el trabajo de los voluntarios, con llamados telefónicos y conversaciones con los vecinos además de listas de difusión.

De hecho, quienes están anotados en distintos grupos de difusión ya empezaron a recibir, desde mediados de la semana, algunas informaciones sobre la provincia. Bajo la consigna “micro acciones, grandes transformaciones #YoVoto”, desde el macrismo se alentó que “hace 40 años que nada cambia” en ese territorio y eso “aleja del progreso, del futuro y de desarrollar todo lo que La Pampa tiene para crecer”, con link incorporado para chequear el lugar donde sufragar y el pedido de replicar el mensaje para alcanzar a más pampeanos.

Cuando Juntos por el Cambio defina a su candidato, deberá enfrentarse a Ziliotto en las generales del 14 de mayo, un peso pesado en materia de números e imagen. El gobernador peronista, con el partido unificado detrás suyo, no tendrá internas y salvo en algún municipio pequeño, el PJ irá sin divisiones. Esto hizo que la oposición tuviera que modificar su certeza (o pretensión de certeza) de ganar la provincia para intentar hacer lo mejor posible, pese a que uno de los candidatos aseguró que el mandatario tiene un importante nivel de rechazo en materia de gestión.

El gobernador se mostró como el dirigente peronista mejor posicionado por cómo gestionó la pandemia, principalmente, y se transformó en la única alternativa posible para el oficialismo. Sobre todo en un contexto en el que la sociedad empezó a abrazar la idea de un cambio radical en la conducción política. Apareció como el nombre indicado para frenar esa ola enojada con la dirigencia tradicional y el resto de sus compañeros lo entendió de la misma manera.

Ziliotto fue abierto a la hora de conformar el armado de las listas propias, le dio lugar a todos los sectores por lo tanto no tuvo ningún inconveniente. Él, oriundo de General Pico pero por su trabajo un referente de Santa Rosa, estará secundado por Alicia Mayoral, referente de la primera localidad mencionada. Entre las dos, está el 50% del electorado total de la provincia.

Por Carla Pelliza * El Destape