Test para saber si tu jefe es pasivo-agresivo: claves para auto evaluarse y qué puedes hacer

Recursos Humanos08 de septiembre de 2024
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En el mundo laboral, las relaciones interpersonales son fundamentales para el éxito de cualquier equipo y áreas. Una de las dinámicas más complejas que pueden surgir es cuando quien lidera exhibe comportamientos pasivo-agresivos.

Este tipo de manifestaciones afecta negativamente la moral, la productividad y la satisfacción laboral del equipo, puesto que corroe paulatinamente la dinámica natural de los colaboradores, acota las instancias de reflexión mutua y, finalmente, deteriora los vínculos.

A partir de mi trabajo como coach empresarial de personas con esta tipología, preparé este test diseñado para ayudarte a identificar si tu jefe pudiese tener este tipo de comportamiento y qué acciones puedes tomar para abordarlo de manera efectiva.

¿Qué es el comportamiento pasivo-agresivo?
El comportamiento pasivo-agresivo es un patrón de comportamiento en el cual una persona expresa indirectamente sentimientos negativos en lugar de manejarlos abiertamente.

Esto sucede porque, en lugar de enfrentar un conflicto o expresar sus preocupaciones de manera directa, quien se manifiesta pasivo-agresivo puede usar la evasión, la procrastinación, los comentarios sarcásticos, la ironía y la falta de cooperación para comunicar su descontento o frustración.

Desde una perspectiva psicológica, este tipo de comportamiento puede ser un mecanismo de defensa para evitar el conflicto directo, que se percibe como amenazante o incómodo. Las personas pasivo-agresivas por lo general carecen de habilidades para la gestión emocional y la comunicación asertiva, lo que las lleva a manejar sus emociones de manera indirecta y, a menudo, disfuncional.

Por si te quedan dudas, estas frases son algunas de las más típicas que suelen utilizar:

"Claro, hazlo a tu manera. A ver cómo sale."
"No es que me importe, pero pensé que lo harías mejor."
"¡Oh, olvidé mencionarlo! Supongo que no era tan importante después de todo."
"¿Estás seguro de que puedes con esto? No quiero que te estreses."
"Pensé que ya lo sabías, pero parece que me equivoqué."

Test para identificar a jefes pasivo-agresivos

El siguiente test está diseñado para ayudarte a identificar si tu jefe muestra comportamientos pasivo-agresivos. Lee cada frase con detenimiento y selecciona la respuesta que mejor describa las acciones o actitudes de tu jefe en el entorno laboral.

Responde las siguientes preguntas con una estas opciones: "Nunca", "A veces", "Frecuentemente" o "Siempre". 

1. ¿Tu jefe tiende a hacer comentarios sarcásticos o irónicos en reuniones de equipo?

2. ¿Evita tu jefe confrontaciones directas cuando hay un problema y prefiere manejarlo a través de correos electrónicos o terceros? (mismas opciones)

3. ¿Hace tu jefe promesas de apoyo o ayuda, pero rara vez cumple con lo que dice?

4. ¿Tiende a procrastinar en tomar decisiones importantes que afectan a todo el equipo?

5. ¿Alguna vez has sentido que tu jefe te está culpando indirectamente por errores o problemas sin decírtelo de manera clara?

6. ¿Tu jefe utiliza el silencio o la falta de comunicación como una forma de mostrar desaprobación o descontento?

7. Cuando le haces una pregunta, ¿tu jefe responde de manera ambigua o confusa, dejándote inseguro sobre su opinión?

8. ¿Te da tu jefe tareas con plazos irrazonables y luego se molesta si no las completas a tiempo?

9. ¿Tu jefe te hace sentir culpable por tomar tiempo libre o por pedir ayuda en tus tareas?

10. ¿Notas que tu jefe cambia de actitud de manera súbita, mostrando primero apoyo y luego desaprobación sin una razón clara?

Cómo calcular los resultados
Para interpretar los resultados de este test, asigna los siguientes puntajes a cada respuesta:

- Nunca: 0 puntos

- A veces: 1 punto

- Frecuentemente: 2 puntos

- Siempre: 3 puntos

Suma los puntos de todas las respuestas, y sigue esta tabla para una conclusión sobre el tema del test:

- 0-7 puntos: Tu jefe probablemente no tiene tendencias pasivo-agresivas significativas. Es posible que haya ocasionalmente malentendidos, pero generalmente se maneja de manera directa y clara.

- 8-15 puntos: Es posible que tu jefe exhiba comportamientos pasivo-agresivos de vez en cuando. Podrías considerar abordar la comunicación de manera más abierta y proactiva para evitar malentendidos.

 - 16-23 puntos: Hay una fuerte indicación de comportamiento pasivo-agresivo. Esto podría estar afectando la dinámica del equipo y la productividad. Considera discutir tu observaciones de manera constructiva con tu jefe o con recursos humanos.

- 24-30 puntos: Tu jefe parece tener un patrón consistente de comportamiento pasivo-agresivo, lo cual podría ser perjudicial para el ambiente de trabajo. Es recomendable buscar asesoría sobre cómo manejar esta situación de manera profesional y buscar apoyo si es necesario.

Recuerda que este test es una herramienta de autoevaluación y no reemplaza el consejo de un profesional. Si el comportamiento de tu jefe está afectando seriamente tu bienestar o desempeño laboral, considera hablar con el área de recursos humanos y un psicólogo para abordar soluciones.

6 estrategias para afrontar situaciones con un pasivo-agresivo

1. Ponerle límites.

Fundamentalmente aprender a decir "no" reiteradamente, ya que este vínculo nocivo y tóxico se alimenta de la disponibilidad del otro.

2. Estar atento a las señales.

Esta conducta promueve que los sentimientos de enojo no se expresen como deberían. Algunas señales: resentimiento, reproches, querer que sientas culpa, sobrecargarte de responsabilidades y no querer hacer su parte; trabas de su parte en un proyecto, falta de aliento, palabras excesivamente edulcoradas, distancia física para no afrontar cara  cara las cosas.

3. Procurar identificar qué siente el otro.

Todo lo que expresa o hace, por lo bajo, tiene un subtexto; por eso será muy útil que aprendas a leer lo no dicho en los gestos, palabras más frecuentes que utiliza, y hasta los emoticones en los mensajes.

4. Esperar.

Discutir e intentar que proceda de otra forma es tiempo perdido. Si tienes paciencia, puedes probar con hablar, sincerar lo que sientes no enjuiciando al otro (esto le dará más poder), sino expresando en primera persona del singular tu perspectiva con ejemplos tangibles y concreto.

Aun así, prepárate, porque una persona pasiva-agresiva es poco probable que pueda intentar darte la razón, por más que te diga cosas como "todos actuamos en espejo, y si esto tanto te molesta en mí, seguramente hay algo de esto en ti". ¿Te resulta familiar?

5. Quita esta experiencia de tu plano personal.

El dolor que tiene el otro es tan grande (por los motivos que sean, y tú no eres su psicoanalista para tener que comerte su basura), que deberás ponerte un buen impermeable para su huracán agresivo. Si puedes, haz que te resbale y apuesta a tu propia conveniencia.

6. Si sufres demasiado, huye. No hay nada que compense esa experiencia.

*Daniel Colombo es facilitador y Máster Coach Ejecutivo especializado en alta gerencia, profesionales y equipos; mentor y comunicador profesional; conferencista internacional; autor de 33 libros. LinkedIn Top Voice América Latina. Coach profesional certificado por ICF en su máximo nivel, Coach certificado, Miembro y Mentor en Maxwell Leadership, el equipo de John Maxwell.

Nota:iprofesional.com

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