Con una serie de paros y marchas en diferentes sectores, el Gobierno enfrenta en los próximos días y semanas conflictos que alteran el termómetro social. Pese a ello, Javier Milei tensiona en varios frentes y hay alerta en la Casa Rosada.  Mientras este miércoles, la calle estará dominada por los efectos del paro nacional de trenes y ya hay convocatorias para medidas de fuerzas y movilizaciones para el resto de la semana, el conflicto docente es uno de los principales focos que altera al Poder Ejecutivo. Por eso el Gobierno salió a contraatacar y avanzar rápido hacia la declaración de la educación como "un servicio esencial" para frenar los paros docentes ante el ajuste de sus salarios. 

Los gremios docentes venían advirtiendo por la falta de convocatoria a una paritaria nacional y la decisión de Milei de no enviar a las provincias el Fondo Nacional de Incentivo Docente (Fonid). Se vienen medidas de fuerza liderados por los sindicatos nucleados en la CGT (AMET, CEA, SADoP y UDA). Anunciaron un paro nacional para el próximo lunes, si el Gobierno no convoca la paritaria. Las clases son un elemento central para la vida y orden de las familias. El Gobierno va hacia el conflicto con intención de ganar la opinión pública y señalar a los maestros. 

A saber: en los últimos dos meses, los salarios docentes perdieron casi el 60% de poder adquisitivo frente a la inflación, lo que significa la mayor pérdida en los 40 años de democracia. Por el momento no hay noticias de la paritaria. 

Otro foco que enfrentará Milei en las próximas horas es el transporte. Este miércoles, los gremios afectados realizarán un paro nacional de trenes, tal como informó el secretario general del gremio ferroviario de La Fraternidad, Omar Maturano. Es “en respuesta a la falta de discusión paritaria en torno a la recomposición salarial ante la inflación galopante que atraviesa la Argentina”, comunicó el sindicato.  

Un ajuste general y nacional

Estos conflictos con diversos sectores se dan en medio de una batalla con la casa central de los trabajadores: la CGT. El fracaso de la reunión sobre el salario mínimo y la desregulación de las obras sociales le echó más leña al fuego. Y en Azopardo ya piensan en otro paro general. Podría ser el segundo en menos de tres meses de gestión de la nueva administración. 

Uno de los que ya anticipó una posible jugada fue uno de los secretarios generales de la CGT: Héctor Daer. El titular del gremio de Sanidad lanzó un paro en su sector por 24 horas para el jueves que viene. "Llevaremos adelante todas las acciones gremiales necesarias para la recomposición salarial de nuestros compañeros de Sanidad", prometió el sindicalista.  

Pero además, en el Estado un sector importante desafía la motosierra de Milei. ATE se diferenció de UPCN, rechazó el 12% ofrecido a los estatales por Nación y lanzó: "El Gobierno nos empuja al conflicto, por lo que el gremio ratifica la jornada nacional de lucha, el paro de 24 horas y las movilizaciones de la próxima semana", anunció Rodolfo Aguiar, titular del gremio. 

En la Patagonia rebelde también se empieza a mover el avispero. Por la completa paralización de la obra de las represas en Santa Cruz. Desde la Unión Obrera de la Construcción de la República Argentina (UOCRA) inició una medida de fuerza por tiempo indeterminado. Y el sindicato de petroleros de Chubut convocó a una masiva movilización para el próximo 22 de febrero. El secretario general de los petroleros de la provincia y diputado chubutense por Hacemos Coalición Federal, Jorge Ávila, prometió: "Nos vamos a meter en YPF el primer día y el segundo día iremos a Tecpetrol, después veremos si entramos también a CAPSA, según la cantidad de despidos", expresó. 

Por otro lado, desde judiciales a científicos hay asambleas y marchas casi a diario. La sede del CONICET de Palermo está virtualmente paralizada por la no renovación de becas y despidos. Este martes, adentro de Tribunales hubo un banderazo de los judiciales nacionales por aumento salarial. Y también se dio un reclamo salarial de bancarios y un acto en defensa del Banco Nación, institución que el oficialismo quiere privatizar. Asistieron Sergio Palazzo (La Bancaria), Pablo Moyano (Camioneros), Daer y Carlos Acuña (Estaciones de Servicio) a la sede del Banco Nación. 

Los movimientos sociales también mueven sus fichas

Asimismo, se acaba de dar una reunión clave entre los Avengers de las calles: Juan Grabois, Emilio Pérsico, Daniel Menéndez y Eduardo Belliboni. Armaron un plan de lucha que promete llenar la Plaza de Mayo con 100 mil personas. Arrancará este viernes en una marcha al Ministerio de Capital Humano, que conduce Sandra Pettovello, y uno de los próximos pasos será frente a la Casa Rosada.

Convocaron a una nueva jornada de protesta con "500 cortes" de rutas y accesos a la ciudad de Buenos Aires en rechazo al congelamiento de los montos en los planes Potenciar Trabajo y recortes a comedores comunitarios, entre otras demandas. 

Mientras tanto se esperan las marchas del 8M (Día de la mujer Trabajadora) y del 24 de marzo (Día de la Memoria), que prometen ser multitudinarias y con consignas completas contra la gestión Milei. 

La calle ya se calentó y sube la temperatura del termómetro social. Milei mientras resiste y contrataca con medidas a la espera del respaldo en la opinión pública que, según datos de la última semana, lo muestra al Presidente en franco deterioro a nivel imagen y como responsable de la debacle económica a partir del 10 de diciembre. 

Por Jonathan Heguier / El Destape