El primer mes del Gobierno de Javier Milei dejó tensiones internas en el peronismo con respecto a las diversas estrategias que conviven en el partido. Estar, acompañar, esperar, resistir o luchar son las diferentes posturas que adoptaron los sectores del PJ ante el vendaval libertario, en un primer mes de mandato en el que el gran protagonista del espacio fue la CGT. 

El movimiento obrero organizado se llevó toda la marca en estos 30 días. Al ser el de los trabajadores y sindicatos uno de los sectores más perjudicados por el DNU y la ley de Milei, se unió con las dos CTA, mantuvo la unidad interna entre los sindicalistas, ya tuvo una movilización austera y ahora promete otra histórica el 24 de enero. Los organizadores esperan 500 mil personas. Será con un paro incluido, el más veloz en la historia de un presidente recién asumido. 

"Hoy somos todos la CGT", resume un histórico del peronismo bonaerense ante El Destape. Su reflexión se mete en medio del debate sobre qué hacer ante los primeros días del gobierno libertario. "Nosotros lo que vamos a hacer es ir, acompañar, pero vamos a estar detrás de la central obrera. No vamos a llevar las banderas de nuestra agrupación. No vamos a ser los protagonistas. Hay que apoyar al sindicalismo argentino, sin poner las banderas nuestras antes de la de ellos", expresó en off ante este portal.

Es parte del sector dentro del PJ que cree que "hay que esperar". Dentro del peronismo, una parte entiende que hay que darle el prudencial paño de 100 días a los nuevos gobiernos y este es ese caso. Aunque advierten: "Ojo porque por cómo viene todo tan acelerado tal vez explote antes, en febrero o marzo". 

Cristina, Massa y el kirchnerismo

En esa misma línea anda Cristina Kirchner. Quienes la frecuentan relataron a El Destape que se mantiene activa, al tanto de cada movimiento del sindicalismo y los sucesos en el Congreso. Pero que coincide con esperar a la reacción de una nueva mayoría cuando el tamaño del ajuste de Milei a la clase media haga estragos.  

Un dirigente que dialogó con la ex presidenta en las últimas semanas entiende que Cristina "va a tener una etapa más estratégica". Explicó a El Destape: "No va a ponerse al frente de vuelta. No va a estar al frente de la tropa". Hoy en El Calafate, CFK hará base en su 2024 en el Instituto Patria.  

Otro de los dirigentes más importantes del peronismo, Sergio Massa, también abona la idea de "esperar". Decidió finalmente que no viajará a Estados Unidos, donde tenía tres proyectos laborales. En este mes se reunió con la CGT, con Axel Kicillof, con Máximo Kirchner y con casi todo el PJ. "Yo estoy acá, sigo laburando", repite. También opina que hay que ser prudente.  

En el peronismo creen que aunque Milei haga volar el país por los aires no habrá beneficio para nadie y menos para el Partido Justicialista. "Si nos ponemos a la cabeza los dirigentes, la gente nos va a correr", hace autocrítica un referente del PJ y diputado ante este portal. 

Por otro lado, hay un sector que pide acelerar. Un dirigente pejotista maliciosamente la llama "la izquierda del peronismo". Y dice que "los dirigentes nos dejamos llevar por las emociones y la emoción no te conduce a un buen lugar. A un artista tal vez sí, pero en política no". Apuntan contra el Frente Patria Grande, Juan Grabois, algunos de los movimientos sociales y "algunos dirigentes referenciados en Máximo Kirchner". 

Sin embargo, Kirchner viene cultivando un muy bajo perfil. Habló solamente dos veces: dio dos entrevistas desde que ganó Javier Milei. La agrupación que lidera no estuvo presente en forma orgánica en las movilizaciones que se hicieron y todo indica que no habrá banderas de La Cámpora en la marcha del 24 de enero. Alrededor de Máximo también entienden que es del team esperar. 

El PJ

En privado, ya son varios los dirigentes del PJ que piden activar al partido. "No está haciendo nada, no está activo. Los instrumentos que tiene el peronismo son los partidos y no están funcionando. Se podría haber llamado a acción política y elecciones a nivel nacional y no pasó nada", afirmó embroncado un dirigente de la PBA. 

Por el momento no hay novedades de renovación. Alberto Fernández tiene mandato hasta 2025 y no movió piezas desde España que indiquen que fuera a llamar a comicios internos. "Sigo en permanente contacto con los dirigentes de mi partido para hacer frente a los acontecimientos imperantes", tuiteó el 21 de diciembre. Quienes los rodean cuentan que tiene intenciones de seguir al frente del PJ hasta el final de su mandato en el espacio. También dejó en claro públicamente que le dará a Milei un período de gracia. "Hay que dejar que el que llega pueda trabajar sin tener eso que uno tuvo desde el primer día, que fue el acoso permanente de no dejarnos hacer", prometió.

Los gobernadores

En el medio quedaron los gobernadores, que en el bloque peronista son ocho pero ya algunos por lo bajo dicen "son seis". Fuentes de diálogo constante con algunos de ellos cuentan que "están desesperados" por las cuentas públicas y que "si no ceden a lo que les pide Milei, se les prende fuego la provincia", se justifican. 

A su vez, prospera la multisectorial que se está armando en la provincia de Buenos Aires por fuera del PJ impulsada por Axel Kicillof y llevada adelante por intendentes. Aunque, al momento, el gobernador (por enfocarse plenamente en la gestión y en los problemas de PBA) no será quien lidere la oposición de Milei. 

Uno de los gobernadores que tomó la posta fue Ricardo Quintela. El riojano sorprendió esta semana y se reunió con Juan Grabois, uno de los dirigentes más activos dentro de Unión por la Patria que nadie duda que no pertenece al equipo de "esperar" o "estar". "Compartimos la necesidad de reconstruir un proyecto humano que tiene en la reforma constitucional que se está tratando democráticamente en La Rioja algunas pistas de la Argentina futura. Vamos a trabajar juntos en esa dirección”, escribió el dirigente social al salir del encuentro con Quintela. Una alianza, hasta hace meses, impensada. 

Legisladores

Mientras, los diputados y senadores batallan en el Congreso ante la ley y el DNU. En UP se destacó la homogeneidad lograda ante el rechazo. Aunque en los últimos días imperó cierto pesimismo: creen que no llegan con los votos y que parte de la ley con modificaciones sale. Ahí adentro no hay "estar, acompañar, esperar o resistir". Lo explica un diputado: "Nosotros acá tenemos que respetar la institucionalidad. Rechazamos todo y no podemos hace más nada". 

Como conclusión y autocrítica, un dirigente del PJ contó que, pese a la unidad reinante en medio de estas tensiones estratégicas, "lo que nos trajo hasta acá es el ego de los dirigentes y anteponer los intereses individuales ante los colectivos". Y agregó: "Con la misma herramienta no vamos a resolver el problema que causamos".

Un mensaje para adentro justo el mismo día que Pablo Moyano dejó una picante pregunta en el aire. El líder de Camioneros dijo en la radio: "¿Dónde están Alberto, Cristina y Massa? Tendrían que reaccionar, convocar y estar en la calle". Una parte de la respuesta se encuentra en los párrafos anteriores. 

Jonathan Heguier / El Destape