Un curioso pedido ingresó en las últimas horas al Congreso Nacional. Y es que los senadores del Frente de Todos impulsan un proyecto que busca ponerle un freno a los empleadores. El objetivo: prohibir las comunicaciones con sus trabajadores fuera del horario laboral.

El proyecto de ley fue presentado por la senadora ultrakirchnerista del Frente de Todos, Anabel Fernández Sagasti, quien solicitó que se modifique el artículo 1° de la ley 11.544 que regula la jornada de trabajo.

La iniciativa es corta pero concisa: además de aclarar que la jornada laboral debe ser de 8 horas diarias o 48 horas semanales, establece la prohibición por parte de los empleadores de enviar mensajes o correos electrónicos fuera del horario laboral.

"ARTÍCULO 1°- Modifíquese el artículo 1° de ley 11.544 que regula la jornada de trabajo, que quedará redactado de la siguiente manera:

(...) La limitación establecida por esta ley es máxima y no impide una duración del trabajo menor de 8 horas diarias o 48 semanales para las explotaciones señaladas", dice el proyecto de ley.
Y agrega: "Entre el cese de una jornada de trabajo y el comienzo de la siguiente quedará prohibido el envío de directivas, consignas y solicitudes de actividades adicionales por medios tales como correos electrónicos, mensajes u otras herramientas tecnológicas".

Dicha iniciativa recibió el visto bueno del oficialismo en el Senado, y al ingresar al Congreso Nacional fue girada a la Comisión de Trabajo, que es liderada por otra ultrakirchnerista: Juliana Di Tullio. La idea del Frente de Todos en la Cámara alta es poder arrancar con el debate del proyecto en comisiones y que pueda concretarse su tratamiento en el recinto en las próximas semanas.

En su proyecto, la senadora Fernández Sagasti explica que uno de los motivos de su solicitud, es que, si bien se ha flexibilizado la manera en que las personas pueden llevar a cabo sus obligaciones laborales, tiene costado negativo "que se torna alarmante", asegurando que en muchas ocasiones "han atado al trabajador aún más a su puesto de trabajo".

En ese sentido, en el texto fundamentó que "hoy en el mundo son millones los/las trabajadores que trabajan a distancia y ejecutan sus labores desde un escritorio en su hogar, desde un parque o desde un café en el centro de las ciudades. Pueden enviar sus trabajos por correo electrónico desde cualquier parte del mundo y realizar reuniones o teleconferencias con personas que se encuentran a cientos de kilómetros del lugar en que ellos se encuentran".

Sin embargo, añadió que "todo lo positivo que puedan ser consideradas las incorporaciones de las nuevas tecnologías y sus aportes para un trabajo más rápido e inmediato, también han mostrado una contraparte que no puede ser soslayada e ignorada, esto es que las nuevas tecnologías en la mayoría de los casos han atado al trabajador aún más a su puesto de trabajo".

Por otro lado, y lo que se torna alarmante, es que han flexibilizado aún más las condiciones laborales de los y las trabajadoras", sentenció la senadora oficialista en su iniciativa.

Por qué hay que frenar los mensajes fuera del horario de trabajo de los empleadores
 

Si bien en las últimas horas la senadora Anabel Fernández Sagasti ha estado enfocada en la defensa irrestricta de la vicepresidenta Cristina Fernández de Kirchner, asistiendo a manifestaciones e incluso compartiendo reuniones partidarias con la expresidenta, la legisladora decidió presentar el proyecto que apunta a proteger a los trabajadores y otorgarles más derechos, presentación que se dio luego de una semana de inactividad en el Senado Nacional, ya que la agenda de la Cámara alta también se modificó debido a la situación judicial de su jefa política.

Así las cosas, y con el proyecto de ley ya girado a comisión, la senadora miró ejemplos y estudios de otros países (como Alemania) para describir una realidad respecto a los mensajes de empleadores fuera de horario a sus trabajadores:

"Las encuestas hablan de entre una hora y una hora y media de trabajo de más gratis para la empresa. Se está produciendo un reforzamiento de las relaciones de poder y se están regalando horas a la empresa", argumentó.

Al mismo tiempo, disparó contra las empresas y sus líderes, y consideró que actualmente hay "estrategias" para seducir a los trabajadores, y que así finalmente "hagan mucho más" por las empresas.

"Están cambiando las relaciones laborales, y no necesariamente de la manera más adecuada. Hay estrategias pensadas para seducir a las y los trabajadores para que hagan mucho más por la empresa", advirtió la senadora nacional.

Mensajes fuera del horario de trabajo: efectos negativos en trabajadores
 Por otro lado, el Frente de Todos describió en su proyecto de ley que está demostrado los efectos negativos que se producen en los empleados cuando los empleadores envían o transmiten información y/o mensajes a sus trabajadores.

En ese sentido, describieron que:

- Puede producir, en ocasiones, una sobrecarga de información y comunicación, dañina para su vida privada.

- Corren riesgo evidente de incumplir los tiempos de descanso diarios o semanales, lo que afecta de lleno la protección de sus salud, recreación y lazos afectivos.

- Produce estrés, sentimiento de cansancio y vacía de contenido lo relativo a los riesgos psicosociales.

En esa misma línea, explicó que en empresas como Volkswagen (Alemania), la jornada laboral de los trabajadores es respetada, y ya desde el año 2011 aplican la modalidad que plantea el oficialismo en su proyecto. "Volkswagen en 2011 anunció que sus servidores dejarían de enviar correos electrónicos 30 minutos después del final de los turnos de los empleados y que recién volverían a empezar media hora antes de que la persona volviera a trabajar", ejemplificó.

"La idea propuesta en el presente proyecto, es que se respete la jornada laboral y que una vez finalizada, el empleador no imparta directivas por distintos medios electrónicos y de esta manera, se respete el horario de trabajo y al derecho del trabajador para realizar su vida", cerró Fernández Sagasti en el pedido que presentó.

Nota: iprofesional.com