





La elección de León XIV como nuevo Pontífice sorprendió a muchos, no solo por su nacionalidad estadounidense, sino también por el trasfondo político de su designación.


Para hablar sobre este tema, Canal E se comunicó con el diputado italiano Franco Tirelli, quien comentó que, “en Italia era muy fuerte la presión para que fuera un Papa italiano”. La expectativa estaba puesta en los cardenales Pietro Parolin y Matteo Zuppi, figuras cercanas al Papa Francisco. Sin embargo, tras la cuarta votación del cónclave, el humo blanco sorprendió a todos.
“Cuando dieron el nombre, fue como que se hizo un silencio, no se esperaban que sea un norteamericano”, relató Tirelli sobre la reacción inicial en Roma. Aunque luego el anuncio fue celebrado con entusiasmo, el nombre de León XIV no estaba entre los favoritos.
La sombra de Francisco y un perfil misionero
Lejos de representar un quiebre con el pontificado anterior, Tirelli remarcó la continuidad con Francisco. “El nuevo Papa también había sido designado cardenal por Francisco y había una relación muy estrecha”, afirmó. Además, subrayó que León XIV, aunque nacido en Estados Unidos, tiene ciudadanía peruana y fue misionero en la diócesis de Chulucanas, en Perú.
“Creo que a lo mejor Francisco lo consideraba más que norteamericano, lo consideraba misionero y misionero peruano”, dijo, marcando una diferencia sustancial con la percepción inicial del nuevo Papa como representante de una potencia mundial.
León XIV y la diplomacia global
Tirelli fue claro en que esta elección no puede leerse sin una mirada geopolítica: “Esta era una votación geopolítica entre lo que es China y lo que es Estados Unidos y el tema de la guerra con Rusia”. El contexto global, atravesado por conflictos como la guerra en Gaza, la invasión rusa en Ucrania y la creciente tensión entre India y Pakistán, influenció fuertemente el cónclave.
“Era un punto crucial el nombramiento del Papa, porque geopolíticamente había muchas conexiones para ver qué Papa podía ser potable para manejar la crisis que tiene Europa”, añadió el diputado, destacando que León XIV podría actuar como un contrapeso o interlocutor con influencia diplomática.
Un líder con raíces en América Latina
Uno de los gestos que más llamó la atención fue el saludo del Papa en español e italiano, omitiendo el inglés. “Habló en italiano y saludó en español solamente, no saludó en inglés”, remarcó Tirelli. Ese gesto fue interpretado como un guiño a su identidad misionera latinoamericana.
Un papado con sello progresista
Tirelli está convencido de que Francisco jugó un papel clave en la elección. “Yo creo que la mano de Francisco políticamente estuvo ahí para que una persona cercana a él llegara al papado”, sostuvo. La rapidez del proceso de elección y el consenso en las primeras votaciones serían indicios de una preparación previa.
“Este Papa va a ser un Papa progresista que va a continuar la línea de Francisco”, concluyó Tirelli, transmitiendo optimismo sobre el futuro de la Iglesia bajo el liderazgo de León XIV.
Fuente: Canal E





