Con la intención de empezar a mostrar un trabajo de coalición, Patricia Bullrich se mostrará junto a Javier Milei en el conurbano bonaerense. La cita probablemente se concrete a mediados de junio, aún con lugar a definir pero con el objetivo de exponer que el presidente, que suele mostrarse en soledad, está acompañado y tiene varios dirigentes que le dan contención y estructura.

Con la excusa de la presentación del libro del presidente, los referentes del gobierno nacional intentarán demostrar públicamente que la gestión es robusta. Será la presentación en sociedad de un trabajo de coalición, en los hechos. Por eso, se espera presencia de dirigentes de distintas fuerzas políticas, no sólo de La Libertad Avanza sino también de la UCR y del PRO.

Por lo bajo, se cuenta a varios dirigentes más cerca de Javier Milei que de la posición de Mauricio Macri, algo así como la nueva grieta de la derecha. Entre ellos, algunos gobernadores que llamativamente son radicales y no amarillos, como Alfredo Cornejo, Carlos Sadir y Leandro Zdero. También Gustavo Valdés pero, por el caso Loan, está más concentrado en los conflictos provinciales. Estos dirigentes, y otros, le hicieron saber al gobierno que Bullrich también es una buena interlocutora para ellos. La ministra de Milei está contenta con el lugar que ocupa en el gabinete y, por el momento, no tiene intenciones de migrar hacia otros horizontes. Su nombre empezó a sonar para encabezar, el año que viene, la boleta de senadores de la CABA pero ella quiere quedarse donde está.

En Seguridad, está dentro del gabinete, mantiene una relación fluida con Milei, está en el día a día, puede mostrar gestión y, además, vínculos con las provincias. En esto último se enfocó puntualmente en su campaña gasolera del año pasado. Eso no quiere decir, sin embargo, que en el día de mañana, ante una necesidad política, ella tenga que ceder frente al pedido presidencial. Bullrich es una dirigente con excelente imagen en la CABA. Una Ciudad que empezó a preocupar al macrismo. Se comenta una encuesta que se mandó a hacer y tiene a los amarillos en 11 puntos. Por eso, no son pocas las voces que consideran, dentro del PRO, que en 2027 podría terminarse el ciclo.

Con el evento de Bullrich y Milei en el conurbano, en agosto, se buscará mostrar una coalición de gobierno porque, si el presidente logra mantener la senda de descenso de inflación e inyectarle incremento del salario real, muchos van a querer subirse a ese tren, desde el antiperonismo, y ellos quieren reservar su lugar. Hasta ahora, Milei se mostró bastante en soledad, siempre concentrado en el discurso económico. Con esa foto, querrán empezar a imprimir también el aspecto político y la idea de respaldo. Será algo simbólico, para mostrar que tiene apoyo, que tiene aliados y que no está solo.

Al presidente le tocará atravesar algunas turbulencias en el Congreso. En la sesión convocada por el oficialismo para el 7 de agosto, en Diputados, es probable que Unión por la Patria pida votar la conformación de una comisión para analizar la conducta de legisladores libertarios que visitaron a genocidas en el penal de Ezeiza.

Por ahora, los bloques aliados del Gobierno no definieron una posición uniforme al respecto. En el PRO, se charlará en la reunión de bloque previa a la sesión mientras que Hacemos Coalición Federal y la UCR tendrán sus encuentros la semana que viene donde probablemente conversen sobre el tema. Al espacio de Miguel Ángel Pichetto, en principio, le cayó muy mal la visita por lo que se espera que aporte votos en favor de la creación de la comisión. Un diputado radical estimó que su armado debería hacer lo mismo.

En la previa, se intentarán dictaminar proyectos con giro a la comisión de derechos humanos. Allí hay un proyecto de declaración presentado por el socialista Esteban Paulón y acompañado por Mónica Fein, la peronista Blanca Osuna y el radical Pablo Juliano. Es para reafirmar el compromiso con el proceso de memoria, verdad y justicia.

Según el reglamento de la Cámara, se decidirá, en votación sin discusión, si el cuerpo hace uso de su capacidad para sancionar a cualquiera de sus miembros por inconducta en base al artículo 66 de la Carta Magna. De resultar afirmativa esa votación, el presidente de la Cámara deberá nombrar una comisión especial de cinco miembros que proponga la medida que el caso demande. Según el artículo 66 de la Constitución, se podrá, “con dos tercios de votos, corregir a cualquiera de sus miembros por desorden de conducta en el ejercicio de sus funciones, o removerlo por inhabilidad física o moral sobreviniente a su incorporación, y hasta excluirle de su seno; pero bastará la mayoría de uno sobre la mitad de los presentes para decidir en las renuncias que voluntariamente hicieren de sus cargos”.

Otro de los problemas que deberá afrontar Milei y que podría encontrar nuevamente a la oposición unida (como con jubilaciones y defensa de la memoria) es el DNU que otorga 100.000 millones a la SIDE en concepto de fondos reservados. Margarita Stolbizer, de Hacemos, se pronunció en contra y pidió su nulidad o rechazo. Lo mismo hizo la Coalición Cívica. En Argentina Política, Germán Martínez, de Unión por la Patria, adelantó que el decreto debe ser revocado por el Congreso.

En sus argumentos, los lilitos plantearon que el DNU no cumple con requisitos básicos ya que el Congreso está en funcionamiento. Tampoco, sostuvieron, guarda razonabilidad, ya que incrementa dinero destinado a fines desconocidos pero no otorga fondos para la estructura. La suma supera el 3.000% de aumento respecto del presupuesto ya disponible, sin guardar coherencia alguna con otras reestructuraciones. Además, al no otorgar ninguna justificación, también dificulta la tarea de la no conformada comisión bicameral de inteligencia para hacer algún seguimiento de su ejecución.

Por Carla Pelliza / El Destape