El año de la robótica

Recursos Humanos 06 de enero de 2024
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Cada vez son más las señales que indican que 2024 será el año en el que la automatización avanzada creada por el machine learning y la algoritmia generativa dan el salto de la pantalla al mundo físico y dan lugar a un avance sustancial en el ámbito de la robótica, con efectos muy significativos y muy difíciles de anticipar.

Los investigadores de DeepMind Robotics publicaron ayer un artículo en su página corporativa en el que detallan una serie de nuevos métodos para entrenar robots mediante vídeo y LLMs, algo que cambia completamente las reglas de lo que se hacía hasta el momento. Al tiempo, han desarrollado también una «Constitución robótica» inspirada en las famosas tres leyes de Asimov, pensada para evitar que los robots puedan, por ejemplo, colisionar con nosotros o hacernos daño cuando nos encontremos en su camino.

Robots que aprenden de forma autónoma por imitación como Mobile ALOHA, que son capaces de aprender a desarrollar tareas sencillas por sí mismos, o que directamente se plantean como humanoides que asisten a las personas en determinadas tareas, como es el caso de Apollo, un proyecto desarrollado por la NASA, o del Optimus de Tesla, que en su última versión parece haberse dotado de muchas más capacidades que incluyen la manipulación fina de objetos.

Estamos, seguramente, ante la llegada de una nueva generación de robots capaces de ser entrenados de maneras mucho más sencillas y directas que lo que conocíamos hasta ahora, cuyos movimientos debían ser cuidadosamente programados uno por uno. Pero ¿qué va a ocurrir cuando los movimientos que es necesario llevar a cabo para hacer muchos trabajos puedan ser no solo fielmente reproducidos por un ingenio robótico, sino que sea además posible que ese ingenio se haga cargo de todas las excepciones posibles, en un modo de automatización que vaya realmente mucho más allá de lo que hemos conocido hasta el momento? ¿Qué ocurre cuando la disrupción que supone la inteligencia artificial alcanza ya no a las tareas de cuello blanco que desarrollamos ante un teclado y una pantalla, sino a las de cuello azul?

Llevamos tiempo anticipándolo, pero todo indica que 2024 va a ser realmente el año en que empecemos a ver robots capaces de automatizar tareas físicas que hasta el momento eran exclusivas de los humanos, y de hacerlo seguramente con mucha más precisión, más perfección y de forma prácticamente incansable.

¿Un mundo sin trabajadores manuales, o con cada vez más actividades asignadas a máquinas en lugar de a personas? ¿Están las sociedades humanas preparadas para algo así?

Nota:https://www.enriquedans.com/

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