El orgullo del hincha de Boca Juniors vive este año horas aciagas, bajo la sombra de River Plate, que inauguró las obras de ampliación de su estadio, el Monumental, y que recibió al seleccionado argentino campeón del mundo, con Lionel Messi a la cabeza.

La comparación entre el Monumental y la vieja Bombonera deja muy mal parado al recinto de La Boca, que tiene capacidad para solo 55 mil espectadores, un aforo escaso para la cantidad de seguidores del equipo xeneize, que cuenta con unos 315 mil socios.

A fin de año habrá elecciones en Boca, y uno de los candidatos opositores, el empresario mendocino Jorge Reale, presentó la maqueta del proyecto para la construcción de una Nueva Bombonera, en la isla Demarchi, al sur del barrio porteño de Puerto Madero y que integra La Boca.

"A días del cumpleaños de nuestro club, es un gusto compartirles el proyecto de un nuevo estadio con el doble de capacidad, para que todos los socios tengamos la oportunidad de ir a la cancha. Sin tirar La Bombonera. Sin irnos de La Boca. Somos el más grande, nos lo merecemos", fue el mensaje que acompañó al montaje que recrea la idea del arquitecto Enrique Lombardi, expresidente de Estudiantes de La Plata y quien ideó los planos en el Estadio Uno de dicho club y el Madre de Ciudades de Santiago del Estero.

Reale agregó: "Podemos tener el mejor y más grande estadio del continente; uno como el que nos merecemos los más de 315.000 socios de Boca y que podría ser una de las sedes principales del Mundial 2030".

El nuevo estadio podría llegar a 128 mil espectadores como número máximo, o 107 mil, si se mantienen las disposiciones de seguridad que indican que el 75% de los estadios tendrán que contar con butacas.

¿La nueva Bombonera será otro fracaso, como el estadio de Armando?
 

Se trata de una parcela de las 12 hectáreas que componen la isla Demarchi, donde estuvo la ciudad deportiva de Boca Juniors en las décadas de 1960 y 1970. El expresidente boquense Alberto J. Armando quería construir una nueva Bombonera con capacidad para 150 mil personas que aspiraba a ser inaugurado el 25 de mayo de 1975 y ser sede del Mundial 1978.

Reale enfrenta varios obstáculos para concretar este proyecto: el primero y principal es que triunfe en las elecciones. Luego, la compra de los terrenos que pertenecen al Gobierno nacional. Este sector del club inició contactos para buscar opciones respecto a su cesión. También debe conseguir la nueva zonificación urbana para autorizar la construcción del estadio.

Otro obstáculo es económico: según Reale, para solventar los gastos del proyecto con capacidad para 128 mil espectadores, se apunta a capitales extranjeros y la preventa de nuevos abonos.

Si se venden 30 mil plazas a 5.000 dólares cada una por un plazo de 10 años se embolsarán 150 millones de dólares; la mitad del costo previsto para el total de la obra.

¿Qué destino tendría la actual Bombonera, un recinto cuya fama de inexpugnable es desmentida por la historia por muchas derrotas, incluso en finales? La idea es que allí jueguen las divisiones menores y también el fútbol femenino de Boca, además de partidos de escasa convocatoria, además de atracción turística.

Nota:iprofesional.com