Son argentinos y crearon un club de suscripción para que cocines con plantas: cómo funciona
El negocio de los clubes de suscripción ya venía en auge y terminó de explotar en los últimos dos años. En el caso de Hola Veggie se trata de un servicio enfocado en el envío de kits para preparar menús plant-based para cocinar en casa. Sus creadores fusionaron sus conocimientos del mundo retail, tech y gastronómico y lanzaron en 2020 esta foodtech que hoy busca levantar su primera ronda de inversión para lanzarse en las principales capitales del país.
Axel Laban Arzubi y Eliana Curcio -actuales CTO y CEO- decidieron frenar la vida corporativa después de varios años en relación de dependencia. Durante un tiempo se dedicaron a viajar por Europa y ahí descubrieron nuevas formas de alimentación y propuestas que en Argentina todavía eran incipientes. Conocieron el modelo de meal kits por suscripción, como la estadounidense Blue Apron y la alemana HelloFresh, que los inspiró a crear su versión local orientada a comidas a base de plantas.
"Hicimos un MVP para ver si había gente que quería este servicio y tuvimos las primeras ventas", cuenta Laban Arzubi. Y agrega: "La idea es eliminar a casi todos los intermediarios en la larga cadena de suministros. Adquirimos al por mayor desde la fuente de origen, diseñamos recetas con alimentos de estación y el desperdicio en heladera incluso es menor porque llega la cantidad exacta de ingredientes".
Hoy Hola Veggie envía alrededor de 300 cajas por semanas con sus menús a base de plantas.
Al proyecto luego se sumó José Pini, quien tenía una empresa de catering que estaba frenada por la pandemia y Hello Veggie pudo aprovechar su planta como centro logístico.
En su primer año pasaron de enviar 20 cajas semanales a casi 300 hoy. El plan cuesta entre $ 2500 y $ 4600, según la cantidad de porciones. La suscripción puede pausarse para recibirla una vez por semana, cada 15 días o mensualmente. Ahora buscan su primera ronda de inversión y esperan levantar US$ 500.000.
¿Cómo utilizan la tecnología?
El negocio descansa en que lo que compramos a nuestros proveedores ya está vendido, por lo que las cantidades son exactas. La clave es invertir en data points. Usamos inteligencia artificial para analizarlo y poder pronosticar la demanda con mayor exactitud. Así vamos a poder recomendar opciones más personalizadas en la medida en que vayan eligiendo recetas y armemos los distintos perfiles de usuarios.
¿Tienen planeado lanzarse en el exterior?
Ahora queremos escalar y consolidar las operaciones en Argentina y con ese aprendizaje replicar el modelo en Brasil, México, Colombia y Chile. La dificultad en América latina tiene que ver con la logística, al tener geografías más amplias, para que los ingredientes se mantengan frescos; y la tecnología, en lo que respecta a las soluciones de pagos recurrentes de suscripción. Tiene que ver con poder gestionar tu plan, omitir algunas semanas, pausarlo y que funcione bien. Esto recién empezó a construirse y está en fase de iteración.
¿Cómo utilizarán la ronda de inversión?
Hoy llegamos a todo CABA y GBA Norte hasta Pilar y con la ronda la idea es que podamos llegar a las principales capitales del país. El desafío está en que las cajas puedan viajar con los ingredientes y estos se mantengan bien y frescos entre 24 y 48 horas. Ahora estamos testeando distintas soluciones de packaging en nuestro laboratorio. La premisa es que todo sea ecológico, ya tenemos un packaging compostable, las cosas se envuelven en bioplástico y estamos probando algunas otras como el biofilm que es algo bastante nuevo acá.
La versión original de esta nota se publicó en el número 341 de revista Apertura.