El 2025, aun comparándose con un 2024 muy malo, terminará siendo un año con niveles de consumo históricamente negativos. La noticia es que en las últimas horas cayó en desgracia el último resquicio de un gasto más o menos sostenido de una parte de la población, ya no quedando sectores con cifras positivas, ni durables ni no durables. La referencia es para la compra venta de viviendas, que tuvo un año con actividad muy destacada, pero pegó un freno grande en noviembre y redujo a la mitad la cantidad de operaciones que se hacen con crédito hipotecario. Esto último es relevante porque evidencia que quedaron comprando propiedades sólo aquellos con dinero para hacerlo, es decir, los que históricamente compraron.
Estas cifras son parte del último informe del Colegio de Escribanos de la Capital Federal, que reportó 5250 operaciones de compra venta por valor de 885.985 millones de pesos en noviembre. De este modo, la cantidad total de las escrituras de compraventa de inmuebles registró en el undécimo mes de 2025 una baja de 8,8 por ciento respecto del nivel de un año antes, al sumar 5250 registros, mientras que el monto total de las transacciones realizadas ascendió un 51,5%, con $885.985 millones. También hubo, según la entidad, una baja en la escrituración del 25,2 por ciento contra octubre del corriente, en el que había habido 7018 escrituras.
El dato más preocupante del informe que, en octubre, hubo 737 escrituras formalizadas con hipoteca. “Por lo que la baja en ese sentido es del 22,4% respecto al mismo mes del año pasado. En los primeros 11 meses se contabilizan 13.065 (+238%)”, expresó el Colegio. Magdalena Tato, la titular de la entidad, dio dos lecturas del contexto, resaltando lo sensible que es la pérdida de ventas vía crédito hipotecario.
“Nos encaminamos a cerrar un año cerca de las 70 mil operaciones, que se ubicaría dentro de los primeros 6 mejores desde cuando comenzamos a medir la serie en 1998. Con esa lectura de un muy buen año, nos desafía a mejorar condiciones para el 2026”, detalló. Y agregó que, “en otra lectura, más crítica, vemos que las operaciones con crédito bajaron a la mitad de octubre, por más que haya sido un mes atípico debido a las elecciones, en donde hubo una congestión de escrituras allí. Pero que hayan desacelerado esas hipotecas explica claramente que el efecto multiplicador (donde se generan otras compraventas) tiende a frenarse”.
Como los especialistas ven que el sector sólo saldrá del habitual mercado maduro si otra gente que no accedía a vivienda ahora lo hiciera, insisten en la relevancia de los hipotecarios. “Si totalizamos cerca de 14000 hipotecas en 2025, sería el segundo mejor año en este aspecto. Quiere decir que con un poco más de carpetas activas podría haber sido el mejor balance desde que tenemos la medición desde 2009. Es por ello que insistimos en redoblar la creatividad para que el acceso a la vivienda sea una oportunidad en Argentina y, claramente, un círculo virtuoso”, concluyó Tato.
Un panorama similar se percibe en las estadísticas del Colegio de Escribanos bonaerense. Con 12.438 operaciones, noviembre registró una baja intermensual del 19 por ciento y una suba moderada del 2 por ciento contra igual mes del 2024.
El fin de los durables
Hasta estos últimos tres meses, y con las ventas de alimentos y bebidas muy deprimidas, la teoría del Gobierno era que la gente que podía destinaba sus excedentes a volcarse a la compra de bienes durables. Antes de la reciente caída de las hipotecas, otros dos rubros muy relevantes en durable habían avisado sobre la crisis de ingresos poblacionales. Motos y autos, que venían mejorando mes a mes en ventas, se pusieron en signo negativo.
Según la Asociación de Concesionarios (ACARA), la venta de motos bajó 10,3 por ciento interanual en noviembre. En tanto que hubo una caída del 28,7 por ciento versus octubre de este año.
Con los autos ocurrió algo similar. También venía con un año bueno, pero en septiembre y octubre empezó a frenarse para ya en noviembre quedar en rojo: ACARA reportó una baja del 3,6 por ciento interanual y del 33,2 versus octubre de este año. Para reforzar estas últimas cifras y ver si son tendencia es bueno revisar qué pasa con las cifras de producción y venta mayorista a concesionarias.
Según la Asociación de Fabricantes de Automóviles (ADEFA), la producción se desplomó un 19,6 por ciento respecto a octubre y del 29,3 por ciento en comparación al mismo mes de 2024.
La información fue confirmada por la Asociación de Concesionarios de Automotores de la República Argentina. Días atrás, ADEFA había advertido una situación similar para los patentamientos hubo un retroceso del 33,2% respecto de las 52.259 unidades registradas el mes pasado y del 3,6% en términos interanuales. En tanto que las ventas mayoristas a las concesionarias bajaron un 21,3 por ciento contra igual mes del año pasado.
Por Leandro Renou / P12
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