


Animales explotados para el turismo: huskies abandonados y sin protección en Ushuaia
Actualidad - Provincial31/05/2025




Nuevas denuncias de maltrato y abandono animal sacuden a los centros invernales de Ushuaia. La situación fue visibilizada por turistas y vecinos a través de redes sociales, donde se expuso el estado crítico en el que se encuentran perros huskies usados para paseos turísticos. La guía de montaña Violeta Lobo alertó sobre el encierro constante de los animales, mientras que testigos del Parque Austral afirmaron que los perros no tienen ningún tipo de cuidado ni supervisión.


La denuncia por maltrato animal volvió a conmocionar a Ushuaia, donde en las últimas horas se evidenció el abandono de perros huskies en al menos dos centros invernales turísticos. A través de redes sociales, turistas y vecinos dieron a conocer el estado crítico de los animales, que permanecen atados, flacos y sin atención médica ni alimentaria. Esta situación, lejos de ser nueva, refleja un patrón reiterado de desidia por parte de quienes lucran con actividades recreativas que involucran a animales.
Una de las voces más fuertes fue la de la guía de montaña Violeta Lobo, quien denunció públicamente que los perros de la empresa Infodeushuaia llevan “más de dos años atados o encerrados en el mismo lugar”, sin cambios en su condición ni respuestas de las autoridades competentes. La situación se repite en el Parque Austral, donde un turista tuvo que intervenir para salvar a un perro que era atacado por otros seis, en un claro ejemplo de ausencia total de control y cuidado.
“Están súper flacos y no hay nadie que los cuide”, denunció otra visitante a través de Instagram, sumando preocupación a una realidad que vuelve a poner en el centro del debate la falta de regulación efectiva. La comparación con el recordado caso del Valle de los Lobos, denunciado en 2018, es inevitable: más de 40 huskies fueron encontrados en condiciones deplorables, lo que derivó en una causa penal aún recordada por la comunidad protectora de animales.
A pesar del creciente repudio social y de la visibilidad del caso, hasta el momento los organismos que deben velar por el bienestar animal no han emitido declaraciones ni iniciado acciones públicas. La falta de intervención oficial no solo permite que la crueldad continúe, sino que también daña gravemente la imagen turística de Ushuaia, dejando a la vista un sistema que normaliza el sufrimiento animal en nombre del entretenimiento.







