Adaptar la cultura corporativa al teletrabajo no es una tarea sencilla. Trabajar desde casa genera una serie de situaciones que, en ocasiones, son contrarios o entran en contradicción con la cultura organizacional. Desde los departamentos de RRHH debemos encargarnos de disminuir el impacto del teletrabajo en la cultura de la empresa y establecer estrategias que contribuyan a su fortalecimiento. En este artículo, analizamos la difícil relación entre cultura de empresa y teletrabajo.

Cultura de empresa y teletrabajo: un binomio complejo de coordinar
Todas las empresas tienen su forma de ser, de comportarse en diferentes ámbitos de actuación y en relación a sus stakeholders y shakeholders correspondientes. Los modelos de comportamiento empresarial constituyen la cultura organizacional, que es única en cada empresa.

Al instaurar fórmulas de trabajo a distancia en la empresa, el departamento de RRHH debe reflexionar sobre cómo mantener la cultura de empresa en el teletrabajo, ya que la relación entre cultura organizacional y teletrabajo suele ser compleja.

En este sentido, habrá que tener en cuenta qué aspectos culturales de la organización existen en el ámbito presencial y cómo trasladarlos, mantenerlos o incluso mejorarlos en el formato online. Estos son algunos de los desafíos de la cultura de empresa con el teletrabajo.

Es posible que existan aspectos de la cultura empresarial en entornos de teletrabajo que consigan mejorar la experiencia de empleado. Sin embargo, existirán otros elementos que no sean tan efectivos o poderosos cuando trabajamos fuera de la oficina.

Si queremos establecer estrategias para fortalecer la cultura de empresa en el teletrabajo, deberemos tener en cuenta factores como los siguientes:

El tipo de perfil profesional de la persona que teletrabaja
Los entornos tecnológicos que se ponen a su disposición
Los beneficios en relación al equilibrio vida-trabajo 

Algunas propuestas desde Recursos Humanos
Además de los elementos básicos citados anteriormente, para fomentar la cultura de empresa en equipos remotos también podemos potenciar los siguientes aspectos:

El estilo de liderazgo: ya que será necesario contar o formar responsables capaces de motivar, organizar y evaluar la rentabilidad de las personas que con mayor asiduidad realizan su trabajo fuera de la oficina.
Ciertas estrategias de reconocimiento remoto: ya que no es tan sencillo establecer procedimientos de este tipo en entornos remotos. Compartir comentarios positivos, apuntalar y ampliar las reuniones One to One para animar y motivar, son algunos aspectos esenciales para mantener el nivel de compromiso en el empleado remoto.
Potenciar la experiencia de empleado: facilitando que, aunque el empleado trabaje descentralizado, pueda sentirse parte del proyecto. Las comidas informales de equipo remoto de forma periódica o la invitación a ciertos actos culturales o de otra índole, favorecerán este sentido de pertenencia.
Desarrollar la comunicación interna: por supuesto, es uno de los elementos esenciales para conseguir una unión entre teletrabajo y cultura organizacional efectiva. En ese sentido, la bidireccionalidad y las opciones de multidispositivo serán esenciales para sentir una conectividad constante fuera de la oficina.

Por lo tanto, una cultura empresarial en entornos de teletrabajo efectiva será aquella que trate de mantener aquellos elementos que ya funcionan en el ámbito offline, y modificar o crear aquellos otros que se necesitan cuando el trabajo se realiza a distancia.

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