Rompiendo el mito: La rotación de talento en ocasiones es necesaria y sana
La rotación laboral se percibe como algo negativo, es un paradigma arraigado en el mercado de trabajo, pero en un contexto de mayor uso de herramientas digitales para trabajar, con la incorporación de nuevas generaciones y la internacionalización de las oportunidades laborales, los cambios de empleo pueden ser más frecuentes, y puede que hasta estos movimientos tengan un impacto positivo en las empresas.
Melhina Magaña, CEO de Daucon, destaca que la transformación digital y la adopción del teletrabajo han hecho que las compañías reconsideren la rotación de talento como una fortaleza más que como algo perjudicial.
“La rotación es necesaria cuando los empleados no logran adaptarse al nuevo entono digital que vino con la pandemia pasada o cuando las necesidades del equipo remoto requieren nuevas competencias”, menciona Magaña.
Arleth Leal, cofundadora del Colegio de Innovación en Recursos Humanos (CORH), coincide en que las salidas voluntarias de una empresa no siempre son negativas, ya que una falta de renovación en los equipos puede generar que la empresa se estanque en las soluciones tradicionales y los mismos procesos, sin cuestionarlos.
“Muchas veces pensamos que cuando un empleado se va, la empresa pierde, pero no siempre es así; el ingreso de nuevos empleados puede ayudar a identificar problemas antiguos y aportar soluciones innovadoras que no se habían considerado antes”, señala Leal.
La llegada de nuevas personas, como lo indica Magaña, trae consigo ideas frescas que pueden revitalizar a equipos atrapados en la rutina evitando el progreso el negocio. Leal lo denomina “ceguera de taller”, la tendencia de las compañías a estancarse con los mismos procesos y puntos de vista.
En el auge del teletrabajo, los líderes se enfrentan a un reto significativo en la gestión a distancia, y el combate con la desmotivación y el agotamiento digital, por lo que ambas especialistas argumentan que, en algunos casos, la rotación puede ser un respiro tanto para el empleado como para la empresa.
Y con esos movimientos, pueden llegar nuevos talentos con habilidades de alta demanda en una era más digital, y que se adapten mejor a nuevas formas de trabajo y transmitan mayor dinamismo al resto del equipo.
De acuerdo con una encuesta de la OCC, el 75% de los trabajadores expresa estar abiertos a cambiar de empleo, con la intención de buscar nuevas oportunidades laborales.
Cierre de ciclos y crecimiento interno
Un aspecto importante que trae la rotación de personal es la capacidad para transformar las formas de trabajar con nuevas herramientas, además de dar una oportunidad a nuevas generaciones de tener un crecimiento dentro de la misma empresa.
“Hay personas que llevan 10 o 15 años en un puesto sin la posibilidad de ascender. La rotación puede abrirles puertas a roles superiores, lo que no solo beneficia al empleado, sino también a la organización, que puede aprovechar el conocimiento acumulado de su personal de mayor antigüedad en roles más estratégicos”, explica Leal.
En ese sentido, hay varios indicadores clave que sugieren la necesidad de rotación. Como la falta de innovación, y la presencia de generaciones homogéneas, son sólo algunos ejemplos de retos a los que las salidas de personal podría ser una solución.
Ambas expertas exponen que cuando una empresa no evoluciona o los empleados se muestran desmotivados también son indicadores de que las compañías necesitan evaluar un cambio en los equipos de trabajo.
Magaña sostiene que, en el contexto del teletrabajo, la rotación puede ser necesaria cuando un trabajador no se adapta a las nuevas modalidades laborales, comenta que “si un empleado no puede manejar la carga de trabajo o se muestra desconectado de los objetivos organizacionales en un entorno remoto, es hora de evaluar si la rotación puede traer mejores resultados”.
Retos en la cultura organizacional
Sin embargo, la salida de talento también plantea retos, especialmente en los que respecta a una cultura organizacional, donde si es estática o no flexible puede ocasionar fricciones en los nuevos perfiles que se incorporan.
Arleth Leal asegura que es común que las empresas teman que los nuevos empleados cambien las dinámicas internas, pero con una gestión adecuada, la rotación es una oportunidad para fortalecer la cultura organizacional.
“La clave está en que Recursos Humanos utilice datos y análisis para decidir cuándo y cómo realizar la rotación, asegurándose de que el talento nuevo se alinee con los valores de la empresa y contribuya a su crecimiento”, dice Leal.
Por otro lado, Magaña comenta que el éxito en la rotación también depende de la comunicación y la transparencia, ya que una empresa que comunica claramente sus metas y expectativas permite que los trabajadores que se incorporan y los que se van entienda el propósito de los cambios, lo que minimiza el impacto negativo.
En un entorno cambiante y cada vez más tecnológico, las nuevas generaciones de trabajadores son un recurso importante y valioso para las empresas que empiezan a capacitar al personal que lleva años en la compañía.
Los jóvenes están mejor adaptados a los cambios tecnológicos y tienen competencias digitales que pueden transformar los procesos internos de las empresas, una actualización de habilidades técnicas que pueden contribuir a la innovación y competitividad de la organización. En ese sentido, las salidas de colaboradores deben ir acompañadas de tecnologías que faciliten la adaptación de los nuevos empleados y la integración de equipos en entornos híbridos o remotos. Magaña subraya que la tecnología juega un rol clave en facilitar y agilizar una rotación eficiente.
“Las empresas que invierten en herramientas digitales, tanto para la gestión como para el bienestar de los empleados, están mejor preparadas para enfrentar el cambio en su plantilla”, afirma Melhina Magaña.
Pero para mantener la cohesión del equipo, especialmente en tiempos de cambio, el liderazgo es un elemento fundamental para ejecutar la transformación con eficiencia, pues un líder que es empático y comprende las necesidades individuales de los trabajadores facilita la salida de talento, haciéndola más fluida y menos disruptiva.
Como menciona Leal, “saber cuándo y cómo implementar esta rotación puede marcar la diferencia en la competitividad de la empresa”. Melhina Magaña agrega que “en un entorno laboral cambiante, la flexibilidad y la adaptación son cruciales, y la rotación de talento es parte del proceso de evolución constante”.
La rotación de talento no siempre es mala, hay casos en los que es saludable para la innovación, el crecimiento empresarial y el desarrollo de nuevas habilidades, el reto de Recursos Humanos es detectar cuándo es necesaria y gestionarla de manera estratégica para asegurar que el cambio sea positivo para la empresa y la fuerza laboral.
Nota:eleconomista.com