La concepción tradicional de éxito en la carrera profesional está cambiando para las nuevas generaciones. Actualmente, llegar a un puesto de responsabilidad, ganar un salario determinado y cosechar logros profesionales no es prioritario para muchos. En un mercado laboral donde cada vez se apuesta más por un ambiente de conciliación real, capaz de aportar flexibilidad a la jornada, la Quiet Ambition o ambición silenciosa se presenta como un cambio de concepción. Tanto en lo que respecta al trabajo, como a lo que antes se clasificaba como “triunfo profesional”. Hoy te contamos en qué consiste esta tendencia que se está extendiendo cada vez más entre la Generación Z.

¿Qué es la Quiet Ambition?
Los cambios que se vienen experimentando en las organizaciones desde hace años responden a una realidad que cada vez más trabajadores exigen a las empresas.

Aspectos como el equilibrio entre trabajo y vida y la priorización de la salud mental por encima de las exigencias impuestas socialmente, hacen que muchos profesionales estén dando de lado la búsqueda constante de un avance profesional.

El concepto de Quiet Ambition que da nombre a esta nueva realidad fue usado por primera vez en abril del año pasado en la revista de negocios Fortune, en la que se presentaba la problemática de perseguir constantemente un ideal de éxito que no tenía por qué ajustarse a las pretensiones personales.

Este cambio de percepción viene dado por la búsqueda constante del progreso profesional, la competitividad laboral y las presiones sociales derivadas de unos ideales que ya no se ajustan a lo que las nuevas generaciones necesitan.

Aunque el cambio de paradigma puede resultar un desafío para el reclutamiento de puestos de liderazgo en las empresas, las estrategias para captar y retener a profesionales se fundamentan en puntos a los que se debe prestar especial atención.

Posibilitar un ambiente de trabajo flexible, ofrecer beneficios sociales y promover el desarrollo personal y profesional son medidas que ayudarán a afrontar esta nueva realidad. Asimismo, mostrarse coherentes con los valores recogidos en la empresa y el compromiso social de la misma, son principios por los que se debe apostar para contrarrestar los efectos de esta nueva tendencia laboral.

¿Qué aspectos laborales importan a la generación Z?
Los profesionales actuales buscan dar a sus vidas un enfoque personal, que no tiene por qué ajustarse a las promociones o los puestos de responsabilidad. En cambio, aspectos como el bienestar laboral y una cultura organizacional que promueva el cuidado psicológico de sus empleados, son elementos esenciales a la hora de elegir y, sobre todo, de quedarse en una empresa.

En el estudio de compromiso organizacional publicado por Betterfly para el año 2023, la generación Z tenía el menor porcentaje de compromiso e interés por permanecer en la misma empresa, con tan solo un 21%.

Esto se debe a que el valor que le dan a las compañías depende de forma directa de los factores asociados a la calidad de vida que ofrezcan en materia de clima laboral, bienestar y principios éticos. Y que deben estar alineados con los valores propios del trabajador y sus ambiciones personales.

La concepción de éxito de la que hablábamos al principio del artículo ya no está ligada con un puesto o un suelo, sino con unas condiciones personales de elección propia que ayuden a los trabajadores a vivir de la forma en que prefieran.

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