Existen diferentes tipos de planes de formación para las empresas que responden a distintas necesidades. No importa cuál sea el tamaño de tu empresa ni el sector económico en el que desenvuelve su actividad, estas orientaciones te serán muy útiles.

¿Qué es un plan de formación?
Pese al creciente dinamismo del mercado y la necesidad de adaptarse a sus continuos cambios, muchos trabajadores confían aún en que su capacitación inicial les servirá durante toda su carrera profesional. Por su parte, no son pocos los empresarios que ven en los planes de formación un gasto superfluo y no una inversión necesaria.

Y sin embargo, solo a través de la formación continua pueden las organizaciones mantenerse relevantes en un ecosistema económico cada vez más competitivo y cambiante. Las nuevas herramientas tecnológicas que aparecen, y las más recientes tendencias del mercado que se imponen, hacen que sea imprescindible el diseño de los tipos planes de formación que mejor se adapten a tus objetivos.

Un plan de formación es el conjunto de acciones y estrategias pensadas y diseñadas para capacitar a los empleados de tu organización. Pero no se trata únicamente de proporcionar algunos cursos para trabajadores. El plan de formación parte de la identificación de las necesidades formativas de la plantilla y de las metas propuestas.

Tipos de planes de formación más comunes
Las diferentes necesidades, fortalezas y debilidades de cada organización requieren diferentes tipos de planes de formación. Algunos de los más comunes son:

La formación para la orientación busca el desarrollo de habilidades específicas que los trabajadores necesitan para el buen desempeño de su trabajo. Puede abarcar todo tipo de temas, desde el manejo de nuevo software o herramientas digitales hasta las normas de seguridad laboral.
El desarrollo de habilidades blandas o soft skills es otro tipo de plan de formación muy requerido hoy en día. La formación ejecutiva para los líderes, el trabajo en equipo y la correcta gestión del tiempo son algunos de los ejemplos.
Los programas de inducción están pensados para optimizar el onboarding en las empresas. La llegada de nuevos trabajadores no se deja al azar y requiere la formación en la cultura organizacional de la compañía.
La formación en cumplimiento normativo y regulaciones es imprescindible en actividades económicas muy reguladas. En estos casos, los empleados deben tener los conocimientos legales que les permitan ajustarse a las normativas relevantes para su sector.
La formación sobre productos se refiere a la información que necesitan los empleados sobre los bienes y servicios que proporciona la empresa.
La formación en ventas proporcionará al departamento correspondiente la capacidad de aprender técnicas más eficaces de venta.
Dónde son más importantes los planes de formación
Aunque no hay organización en la que sean prescindibles, también es cierto que en determinados sectores son mucho más necesarios los planes de formación.

Las empresas que trabajan en el campo de la tecnología se enfrentan a un entorno que se renueva más rápidamente que cualquier otro. Los tipos de planes de formación que inciden en el uso de software o lenguajes de programación son ineludibles.
El sector financiero, ya que debe estar al día con las continuas novedades en regulaciones legales y tendencias comerciales.
Las empresas del sector de la salud y la atención médica, debido a los continuos avances en medicina y la actualización de protocolos de atención y seguridad.

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