Hace más de 60 años, el hijo de un inmigrante ruso tuvo la idea de comprar una máquina para fabricar salchichas y venderlas con su propia marca. No era algo tan común en aquella época, ya que la mayoría de las empresas del rubro se dedicaban a otros productos. Con el tiempo, Vienissima se convirtió en uno de los grandes jugadores del segmento con sus tres perritas salchicha como estandarte de marketing.

En 1927 León Podgaetzky llegó a Buenos Aires y un año después lo siguió su hermano mayor, Elías. Su familia se dedicaba al negocio cárnico en su país natal, entonces los hermanos abrieron una carnicería en Ciudadela. Poco después instalaron un puesto en el Mercado Arenales, en Villa Devoto. En ese mismo barrio darían el gran salto.

La clientela creció tanto que tuvieron que buscar un lugar más grande y adquirieron un mercado sobre la calle Tres Cruces (hoy avenida Francisco Beiró). La propiedad estaba preparada para ser un frigorífico, así fue que la empresa empezó a producir sus propios chacinados y jamones bajo el nombre Frigorífico Tres Cruces.

El origen de Vienissima
El nacimiento de su marca insignia se dio tras la muerte de León, en 1958. Su hijo, José, tomó el mando de la empresa con tan solo 23 años. En 1962 compró la maquinaria necesaria para fabricar salchichas y, como el local ya les quedaba chico, invirtió en una propiedad ubicada en Villa Tesei. Después de dos años de obra, la firma inauguró su fábrica en 1970.

Para promocionar a su marca de salchichas de Viena, Tres Cruces lanzó una serie de spots protagonizados por un trío de perros salchicha, que se volvieron los protagonistas de la etiqueta. En los 80 innovaron con variantes rellenas de queso o espinaca y algunas ahumadas.

Las pancherías y un incendio devastador
Molinos Río de la Plata adquirió el frigorífico en 1989 y pasó a controlar Vienissima. La alimenticia incluso llevó a la marca directo al consumidor con la inauguración de las pancherías Vienissima Ya! en 2008, sin embargo el proyecto no prosperó.

La fábrica original de Tres Cruces funcionó en Villa Tesei hasta 2013 cuando un incendió la consumió por completo. Dos años después, Molinos le vendió su negocio de productos refrigerados a la brasileña BRF. El paquete incluía marcas como Goodmark, Manty y Delicia.

En manos brasileñas
Con esta adquisición, BRF pasó a controlar un tercio del negocio de salchichas a través de Vienissima, Patyviena y Hamond.

Industria argentina Eran 5 hermanos, convirtieron su garaje en una fábrica y crearon una marca que está en todas las cartucheras
No obstante, en diciembre de 2018 le vendió Quickfood, sociedad por medio de la cual había concentrado sus activos locales, a su compatriota Marfrig por u$s 60 millones. A principios de ese año, BRF había solicitado el procedimiento preventivo de crisis para su planta en Baradero, donde elaboraba salchichas y fiambres.

Hoy la compañía brasileña continúa elaborando en esta fábrica y tiene una capacidad de 2100 toneladas mensuales de salchichas y 400 toneladas de jamón. En total cuenta con 5 unidades productivas en el país para sus marcas, desde Paty, Goodmark y Barfy hasta Green Life y La Morocha.

Nota:apertura.com