En la Argentina de la inflación interanual del 78,5%, el valor más alto en los últimos 30 años, no es de extrañar que el sueldo y el bono sean los puntos más importantes para que una persona se decida por aceptar o no un empleo, o quedarse en la empresa en la que está.

La consultora WTW relevó en 23 países cuáles son los factores de atracción y retención de talento en esta etapa post-pandemia, en la que las prioridades de las personas cambiaron. Aseguran que esa tendencia se repite en todo el mundo. El cambio es que comenzaron a surgir con más fuerza que antes temas como la seguridad en el empleo, el clima laboral y la flexibilidad.

"En lo que a retención se refiere, en todo el mundo los dos aspectos más valorados son el salario y bono y la estabilidad laboral. Recién en el tercer factor empiezan a aparecer diferencias regionales: en América del Norte, se encuentran los beneficios en salud; en Europa, la relación con los compañeros de trabajo; y en Latinoamérica, las oportunidades de aprender nuevas habilidades", dijo a este medio Fernando Beccar Varela, Associate Director de Health & Benefits en WTW. 

El estudio, titulado Global Benefit Attitude Survey (GBAS), también ahonda en las diferencias de género y de edad en los puntos que hacen la diferencia para que un empleado se comprometa con la empresa y se quede.

Seguridad y flexibilidad

De esta encuesta global participaron también mil empleados de la Argentina, un país que transita por un período de altísima rotación, de acuerdo a los expertos consultados por este medio. 

La GBAS 2022 permite entender en qué puntos las empresas pueden apuntalar su propuesta a empleados clave, de manera de ofrecerles ventajas y beneficios que realmente les sirvan y les hagan una diferencia.

Los factores más importantes para atraer o retener no varían demasiado en orden de importancia, excepto en casos como el "buen clima laboral" y la relación que se forma con los compañeros que se conocen en un empleo en particular. Por el contrario, el tiempo libre remunerado (vacaciones), las licencias y la preocupación por el bienestar aparecen más alto del lado de la atracción.

Así como el salario y el bono están al tope del ranking en todas las categorías analizadas, Stella Maris Sanyan, Directora de Salud de WTW, asegura que "a la hora de atraer a nuevos talentos, encontramos que hay distintos elementos que los candidatos evalúan, dependiendo de su género y generación."

"Por ejemplo, el trabajo flexible es más valorado por las mujeres; la seguridad en el empleo, altamente apreciado por las generaciones desde la X a la Z," afirmó. 

Pero respecto de la seguridad laboral como factor de atracción, la directiva encontró que es más valorada en los hombres, en tanto que para las mujeres sigue siendo más importante que eso la flexibilidad como aspecto para aceptar o no una posición. No obstante, al hacer el corte por industrias, la seguridad laboral aparece siempre en el top 3.

Al hablar ya de retención de los talentos, la seguridad laboral si aparece como un factor de la más alta importancia en el caso de las mujeres, junto con los beneficios de salud. La flexibilidad en ese caso pasa al cuarto puesto.

"La seguridad para los hombres aparece en segundo lugar (debajo del salario y bono) en cuanto a factor de retención. La salud no es una prioridad porque entendemos que los planes médicos ya son parte de la oferta de valor que ofrecen las empresas, por lo que notamos que hay expectativas por otros aspectos considerados más determinantes para seguir con el mismo empleador", expresó Beccar Varela al respecto.

Otra diferencia notoria de género es que los hombres generalmente le dan más relevancia a la relación con sus compañeros de trabajo (aparece como tercera preferencia de retención), mientras que las mujeres lo ubican en el quinto lugar

Entre los factores de retención, la seguridad laboral es crucial para los "boomers" y la Generación X, y desplaza del primer puesto al sueldo y el bono. En segundo puesto, los boomers ubicaron el vínculo con sus colegas.

Flexibilidad como un commodity

Algo que ocurrió tras la pandemia, donde empleados de todo el mundo demostraron que podían desempeñarse a distancia con altos niveles de productividad y confiabilidad, fue que las empresas se quedaron sin excusas para ofrecer la flexibilidad horaria que hasta ese momento disfrutaban solo algunos ejecutivos selectos o grupos muy valorados como los de IT.

Esa posibilidad, en la nueva era del trabajo, se extendió a todas las áreas y trabajos en los que esa modalidad es posible. En la encuesta de WTW, es un factor de atracción clave para los puestos de servicios financieros, alta tecnología (HT, por sus siglas en inglés) y telecomunicaciones (Teleco). Son rubros en los que estos esquemas de trabajo son ya un estándar de mercado.

"En todo el mundo, esas son las dos industrias que consideran la flexibilidad como prioritario. De todas maneras, se nota un avance en el resto de las industrias ya que vemos que empieza a ser un aspecto más preponderante que en años anteriores", aclaró a este medio Beccar Varela.

En cuanto a la retención, la seguridad laboral aparece al tope en el caso de los servicios públicos y la salud, por encima incluso del salario y bono. La relación con compañeros de trabajo es top 3 en más de la mitad de los sectores analizados. En tanto que el trabajo flexible sigue siendo prevalente en servicios financieros y alta tecnología.

Bienestar y compromiso

Siendo el bienestar personal y de sus familias algo que cobró mayor relevancia con la pandemia, al punto de estar en la mira de las empresas como eje central de su estrategia de capital humano, WTW se dedicó a estudiar cómo influye en el compromiso y el deseo de quedarse en el empleo actual.

Beccar Varela destacó que "la GBAS concluye que los empleados que piensan que su empresa ha tenido éxito apoyando el bienestar durante la pandemia, son más propensos a estar comprometidos, productivos y a quedarse en sus trabajos. La brecha entre estos dos grupos de empresas es muy significativa y confirma la importancia de contar con un programa integrado de Bienestar."

En concreto, WTW halló que el 83% de quienes sentían que su bienestar había sido apoyado por su empleador, afirmaban que podrían quedarse en la empresa en la que estaban por los siguientes dos años. Solo el 53% de los que no sentían que el bienestar haya sido eje en la compañía en la cual se desempeñan decía lo mismo. La brecha es del 30%. 

No obstante, al hablar de compromiso, solo el 8% de los que no vieron que la compañía le diera importancia al bienestar dijeron estar comprometidos con su empleador. En el caso de los que si sintieron apoyo en este aspecto, el 52% dijo tener compromiso. La diferencia se agranda al 44 por ciento. 

Nota:iprofesional.com