La reciente comunicación del BCRA para anunciar un engorroso y confuso sistema para que el campo liquide la supuestamente retenida cosecha de soja luce solo como una especie de buena intención de las autoridades del BCRA por mejorar el tipo de cambio efectivo. 

Es lo que podemos llamar una especie de creencia de devaluar  sin devaluar el peso efectivamente frente al dólar que probablemente no genere una gran liquidación de dólares por parte del sector exportador de aquí hasta el próximo 31 de agosto.

Hasta el martes, la decisión del BCRA era muy resistida tanto por el presidente  Alberto Fernández como por la vicepresidenta Cristina Kirchner pero finalmente pasadas las 19:00 se conoció la comunicación de la autoridad monetaria. 

La normativa indica que una vez que él productor liquide la soja para exportar, con el 70 por ciento de los pesos que reciba podrá hacer un depósito bancario utilizando el esquema dólar linked que ajusta al tipo de cambio oficial y con el 30 por ciento restante de los pesos le puede comprar dólares al BCRA al tipo de cambio oficial a la vez que deberá pagar el impuesto PAÍS del 30 % y las retenciones y luego de esas dos operaciones surgirá un nuevo tipo de cambio diferencial con el cual los productores decidirán si venderán o no su cosecha.

Dólar soja: cuáles son las estimaciones de los expertos
 Las estimaciones de algunos analistas del sector consultados indican que con el 30 % de los pesos que se obtendrían por la liquidación de la exportación el tipo de cambio sería de aproximadamente unos 240 pesos muy cercanos al llamado dólar tarjeta para hacer compras en el exterior. 

En caso que el productor venda soja por 1.000.000 de pesos podría comprar unos 1300 dólares y además hacer un depósito en pesos ajustable al dólar oficial por unos 700.000 pesos.

Según la opinión del analista Salvador Di Stefano la medida del BCRA no será efectiva porque solo se le ofrece al productor agropecuario comprar dólares un poco más baratos y hacer un plazo fijo indexado a la evolución del dólar oficial y no se le ofrece al chacarero un tipo de cambio más competitivo. 

"El presidente quiere que los empresarios agropecuarios vendan lo que no tienen. Si no cambia de relato, el dólar trepará a niveles muy altos y los empresarios agropecuarios, tienen la difícil tarea de convivir con un negocio a cielo abierto, esto implica que entre todas las variables que maneja un empresario tradicional, en el campo hay que agregar una variable incontrolable que es el clima" explicó el experto.

Cuántos millones de dólares de la soja están sin liquidar

Hay que destacar que el 70% de los empresarios agropecuarios no trabajan en campo propio, por ende, alquilan campo a terceros para desarrollar su negocio. Lo que un empresario paga por el alquiler de la tierra es una suma fija, que equivale a un 40% de los ingresos brutos de lo que produce el campo, en condiciones normales. Si tiene buena cosecha paga esa suma fija, si tiene mala cosecha paga también esa suma fija. 

En lo que respecta a la tesis del gobierno que existen unos 20.000 millones de dólares de soja sin vender guardadas en silos y en silobolsas hay que mencionar que en el año 2022/23 la cosecha de soja se ubicó en 43,3 millones de hectáreas, esto implica que un 70% de dicha producción se realizó sobre campo alquilado. 

Esto implica que quienes realizan esta operación como previsión guardan un 40% de lo que cosechan, para pagar los alquileres de esta campaña o la entrante, ya que, si no pueden cosechar por problemas climáticos, el alquiler se paga igual. 

Por otra parte el 70% de la producción de 43,3 millones de toneladas, son unos 30,3 millones de toneladas, de ese total 12 millones de toneladas quedan guardadas como reaseguro de los alquileres a pagar en la próxima campaña.  Esto implica que, sobre esos 43,3 millones de toneladas producidas, si le restamos los 12 millones de toneladas para pagos de alquileres futuros, nos quedan 31,3 millones de toneladas. En la actualidad según datos del Ministerio de Agricultura Ganadería y Pesca, los productores han vendido un total de 20 millones de toneladas, esto implica que vendieron el 46% del total cosechado. 

Qué pasa con la soja vendida
 Pero en este aspecto es importante resaltar que la soja se cosechó en el mes de mayo, y que aún no pasaron 60 días del momento en que se recolectó la oleaginosa, esto quiere decir que el nivel de ventas es muy importante. Para agregar más claridad al análisis, en los últimos 8 años las ventas a esta fecha, tomadas sobre la cantidad cosechada, siempre se ubicaron en torno del 50%, por ende, no hay nada que acusar y sospechar por la cantidad de soja vendida. 

"Los exportadores compran la soja, pero no exportan mayoritariamente soja, producen harina y aceite de soja, en lo que va del año solo se exportaron 1,5 millones de toneladas de soja, mientras que el resto fueron subproductos como aceite y harina. Las Declaraciones Juradas de Ventas al Exterior sumarían aproximadamente 16,5 millones de toneladas" explicó Di Stefano.

Como el Ministerio de Agricultura, Ganadería y Pesca no brinda información del stock de soja guardada de años anteriores, no parece apropiado hacer especulaciones del stock de soja que provienen de otros años, sin embargo, las estimaciones de mercado indicarían que habría un total de 10 millones de toneladas que se acarrean de años anteriores y no los 20 millones que calcula el gobierno.  

Por otra parte, como la cantidad de soja cosechada en la campaña 2021/22 asciende a 43,3 millones de toneladas, a las que le deberíamos sumar unos 10 millones de toneladas guardadas de campañas anteriores, esto nos daría un total de 53,3 millones de toneladas.  Del total de soja disponible, pasan de un año a otro un stock de 12 millones de toneladas, que es la previsión para pagos de alquiler futuro. Esto implica que hay un stock de 41,3 millones de toneladas. 

Del total, el productor vendió 20 millones de toneladas. Esto implica quedarían por vender 21,3 millones de toneladas. Esta mercadería se liquida entre los meses de agosto 2022 y abril de 2023, ya que se va vendiendo en la medida que el productor las necesita para pagar deudas, comprar insumos o para los gastos de estructura de la empresa. En los próximos 9 meses se van a liquidar unos 21,3 millones de toneladas, lo que implicaría una venta mensual promedio de 2,37 millones de toneladas. 

La soja es la moneda del campo

En el caso que la soja valga hoy aproximadamente unos 510 dólares la tonelada, esto implica que, si en los próximos 9 meses se pueden vender 21,3 millones de toneladas aproximadamente, esto implica que los dólares  a ingresar ascendería a unos 10.863 millones. Si lo contabilizamos por mes, esto implica que podrían ingresar unos 1.207 millones  de dólares por mes. 

La soja se guarda porque es la moneda del campo. Los alquileres de todos los cultivos ya sean soja, maíz, trigo o lo que se te ocurra se pagan en función de los quintales de soja. Las empresas de insumos hacen planes de venta de sus productos con canjes de soja a cosecha o a un mes determinado, esto es muy beneficioso porque le deja un ahorro impositivo al empresario agropecuario. 

Cuando un empresario agropecuario guarda soja de una campaña a otra, en el paso del tiempo, por la variación de precio paga impuesto a las ganancias,por ende, cuando el productor ahorra en soja le termina pagando más impuestos al Estado, que si ahorraría en dólares en cabeza de persona humana.

Con respecto a la reciente decisión del BCRA de instrumentar un nuevo tipo de cambio para el campo podemos concluir que se trata de una media que mezcla un subsidio del estado para que el productor compre dólares más baratos que el mercado de dólares financieros alternativos combinado con otra operación fina era que se posible que no genere una gran incentivación al sector para que venda la soja acopiada al sector exportador a la espera de una devaluación del peso frente al dólar.

Para entender la reciente medida y el pensamiento del directorio del Central es importante mencionar algunas ideas de Miguel Ángel Pesce quien ha manifestado en recientes reuniones con empresarios y banqueros algunos conceptos económicos que resultan bastante polémicos.

 Cuando lo consultan sobre la posibilidad de una futura devaluación del peso frente al dólar en el mercado oficial manifestó que: "al dólar oficial le meten ruido las expectativas porque los pequeños comerciantes siguen de cerca la evolución de los dólares financieros alternativos y del dólar ilegal pero la fuerte suba de estos no afectará la cotización del dólar oficial".

Nota: iprofesional.com